Es oficial, Porsche y Audi entrarán a la Fórmula 1. El CEO del grupo Volkswagen, Herbert Diess, confirmó que estas 2 marcas entrarán a la máxima categoría y que lo harán en el cambio de reglamento del 2026. Dicho reglamento le dará más prioridad a la electrificación que a los motores de combustión interna, algo que le interesa impulsar al Grupo Volkswagen. El anuncio se hizo en medio de un video en directo, en diálogo con los habitantes de Wolfsburg, el hogar de Volkswagen.
Entre preguntas de aquella entrevista, el CEO de Volkswagen soltó que tanto Audi como Porsche entrarían a la Fórmula 1 como marcas independientes. Diess aclaró que desde el primer momento, quien entraría a la máxima categoría serían esas marcas, cada una por su lado y no el Grupo Volkswagen en sí. Por ahora se cree que Audi entrará como una escudería independiente y quizá compre a McLaren para ocupar su lugar. Por el lado de Porsche, lo más seguro es que participe vendiendo motores, tal como lo hizo Cosworth en sus años mozos. Esto sería la confirmación de que Porsche entraría a reemplazar a Honda como proveedor de motores para Red Bull.
Una oportunidad única
Para nadie es un secreto que la Fórmula 1 está atravesando por un auge importante y tanto Porsche como Audi quieren hacer parte de ello. La adquisición por parte de Liberty Media, el abandono de las cuarentenas y el aumento de carreras en los Estados Unidos ya habían hecho maravillas por la máxima categoría. Mercedes-Benz ha cosechado muchos beneficios gracias a su participación, como adelantos en tecnología y toneladas de publicidad positiva; mientras Lewis Hamilton dominaba la categoría. Ahora, con las nuevas reglas de este año y las que se vienen para el 2026, Audi y Porsche quieren un pedazo de este pastel.
Que una marca automotriz declare que domina la Fórmula 1 gracias a su superioridad tecnológica es la mejor publicidad imaginable. Tanto Audi como Porsche se cansaron de que sólo Mercedes-Benz estuviera gozando de esas mieles y ahora van a tomar parte en el juego. Audi quiere demostrar su superioridad en el tema de la electrificación, mientras que Porsche ya está haciendo su tarea con los combustibles sintéticos. El Grupo Volkswagen fue enfático en decir que esto era una decisión independiente de cada marca. Sin embargo, no podemos dejar de pensar que es una estrategia para demostrar el poderío tecnológico de todo el grupo.
