Pebble Beach es quizá la reunión más prestigiosa y elegante del mundo automotriz. Estar allí es reconocimiento a la perfección automotriz, sea de ayer u hoy. ¿Pero ser el mejor del show? Eso es como ganarse un Oscar pero sobre ruedas. En la edición 2023 de Pebble Beach fue un Mercedes-Benz 540K de 1937 el recipiente de ese honor.
Esta es la décima vez que el jurado de Pebble Beach elige a un auto de Mercedes-Benz como el mejor del espectáculo. Como a las marcas les gusta alardear por todo, la casa alemana ya puede decir que son la marca más exitosa en Pebble Beach. Aunque este auto no pertenece a Mercedes-Benz, la marca conoce muy bien su historia y ayudó en su labor de restauración antes de desfilar por las calles de Monterey, California.
De un rey a un coleccionista
Concebido en 1936, el Mercedes-Benz 540K es un deportivo cuyas raíces provienen del SSK, un exitoso biplaza de finales de los años veinte. El 540K usa un motor de ocho cilindros en línea con un sobrealimentador para producir hasta 180 caballos de potencia, con una transmisión de 4 o 5 cambios bastante adelantada para su tiempo.
Este ejemplar en particular fue ordenado por el Rey de Afganistán Mohammed Zahir Shah. Este fue su dueño hasta la década de los cincuenta, cambiando de manos en varias ocasiones, todas preservando su autenticidad y pureza. El vehículo fue a parar a la colección de Jim Patterson, recipiente de varios premios del mejor auto en Pebble Beach. Curiosamente otro Mercedes-Benz 540K triunfó en Pebble Beach en 2021, pero en su versión coupé aerodinámico o Autobahn Kurier.
Casi 90 años y ni se le notan
Este 540K, en su variante Special Roadster de dos plazas, fue restaurado antes del concurso por RM Auto Restoration en compañía de Mercedes-Benz. La marca puso a disposición del dueño varios de sus expertos, documentos originales y planos para preservar la imagen original del 540K, culminando su trabajo a tiempo para Pebble Beach.
Sepa que su dueño actual pagó casi 10 millones de dólares cuando adquirió al Mercedes-Benz 540K en 2022. Ese es el precio de un auto que, a pesar de su restauración, preserva su aura original. Su motor jamás se ha cambiado, su carrocería y chasis se mantienen en un estado inmaculado y en sus cerca de 90 años de existencia apenas marca 20.900 km en su odómetro.
Pebble Beach está para celebrar esos preciados vehículos de los años veinte a cincuenta, y la elección del Mercedes-Benz 540K como el mejor de este año era más que obvia.
