Cual adulto mayor tratando de montar patineta, Chevrolet fracasó estrepitosamente al intentar vender su primer NFT. La marca del corbatín intentó incursionar en el mundo digital con un combo que parecía irresistible. La oferta consistía en un NFT con una obra de arte creada por el artista digital xsullo. La obra retrata a un Corvette Z06 con un color único llamado Minted Green. Cuando nos referimos a único es en serio, porque esta compra viene con un Corvette Z06 real pintado en ese color y no se aplicará a ningún otro auto, ya que ese tono hace parte de la compra.
La sucia codicia
Bueno, parece un ofertón, entonces, ¿qué fue lo que le falló a Chevrolet con su primer NFT? El precio. El artista xsullo inició la subasta en la plataforma SuperRare el 20 de junio y se mantuvo abierta hasta el 24 del mismo mes. La oferta base era de 206 ETH, es decir, 206 unidades de la criptomoneda Ethereum, que en ese momento equivalía a unos 238.960 dólares americanos. El problema es que nadie hizo una oferta en los 4 días que estuvo abierta la subasta.
Pasadas unas pocas horas, xsullo volvió a abrir la subasta por 24 horas más, esperando que el revuelo creado por el evento NFT NYC se calmara. Sin embargo, tampoco hubo oferentes y la oferta se cerró. Para echarle sal a la herida, varios usuarios entraron después y ofrecieron cantidades menores para tratar de hacerse con este combo, pero las ofertas no subieron de 4 ETH. Seguramente está pensando que fue una oportunidad perdida y que una ganga así no se puede dejar pasar. Sin embargo, a la hora de la verdad, el precio estaba fuera de toda proporción.
El valor real de las cosas
En teoría, un Corvette Z06 similar al que se ofertaba ronda los 90.000 dólares, que con los extras y los sobreprecios de los intermediarios puede llegar a los 150.000 dólares. De ahí a pagar casi 240.000 dólares por el mismo auto, pero asociado a un artículo que no es físico, no es un buen negocio. No olvide que artículos digitales como estos se han llegado a vender por millones, pero esos son casos extraños y de dudosa procedencia. Además, los términos y condiciones no ayudaron en este caso, ya que no dejan claro que es lo que se está comprando exactamente.
Sí, era un Corvette con un color único, con el paquete de rendimiento Z06, ruedas de carbono y una placa especial con el código RFN del NFT. Además, el número de serie estaba compuesto de unos y ceros únicamente, todo para asociarlo a la Web. Sin embargo, sale más barato comprar un Corvette con esas opciones de cualquier color y luego llevarlo a West Coast Customs, ellos sí harán algo único, no sabemos si sea bonito, pero será único. Finalmente, otro factor que le jugó en contra al NFT de Chevrolet; el dichoso color único llamado Minted Green se parece mucho al verde brillante que podía tener el Spark.
