He aquí otra definición perfecta de un sleeper, o un tributo de lo que podía ser Herbie en 2023. Si los rines no son indicador suficiente de la naturaleza de este Volkswagen Beetle, por debajo se esconde el motor, chasis y transmisión de un Porsche Boxster. Receta perfecta para tomar por sorpresa a más de uno en el 1/4 de milla o en cualquier semáforo.
Es una conversión bastante convincente porque a simple vista no parece nada raro hasta que examina con detalle el Beetle. Casi parece el antepasado del New Beetle RSI, pero con motor trasero y más fácil de producir. Lo mejor es que se encuentra a la venta en Alemania, por si se encuentra en Europa y está buscando algo completamente fuera de lo común. Parece una excelente opción para juguete de pista, si me lo pregunta.
Un Beetle que pasó muchos días en el gimnasio
La historia de esta conversión inicia hace una década en Austria. Lugar de origen de CarMaxx Classics, preparador que un día decidió combinar las entrañas de un Porsche Boxster con la apariencia inofensiva de un Volkswagen Beetle. Este ejemplar ha tenido una vida benigna, porque solo ha recorrido 2.000 km desde su conversión, y luce en estado inmaculado. Por cierto, recibe el nombre de Bugster, juego de palabras entre Bug y Boxster.
Si sabe identificar bien el estilo de un Beetle sabrá que hay algo que no cuadra. Así que aquí arriba le dejo una comparación con un Beetle similar para que note las diferencias, y si quiere las señale en los comentarios. No le garantizo un premio, más allá de un aplauso por ser un conocedor de Volkswagen clásicos.
El Porsche más puro que verá hoy
La conversión partió de un Volkswagen Super Beetle, la última actualización que recibió el modelo en la década de los setenta y que hizo crecer al “Escarabajo de siempre”. Este ejemplar creció aún más a lo ancho para acomodar el chasis del Boxster, particularmente en los ejes y pasos de rueda. Casi parece un modelo a escala de Hot Wheels.
Dicho chasis literalmente contiene el motor central de 3.2 litros, ejes, suspensión, transmisión, frenos e incluso tanque de gasolina de un Boxster S. Lo único que alteró CarMaxx, además de los pasos de rueda y tomas de aire en los costados, es el motor que pasa de 248 a 270 caballos de potencia. Gracias a su carrocería más ligera y un sutil spoiler, el “Escaraboxster” como decidí llamarlo es capaz de superar el 0 a 100 km/h en poco más de 5 segundos. Ni Herbie era capaz de esa aceleración.
Otros detalles no menores incluyen el cuadro de instrumentos del Boxster, llantas Toyo semilisas, transmisión manual de 6 marchas y el tradicional arranque de Porsche a la izquierda del volante. Hay que admitir que es una conversión de calidad y su precio lo refleja: 195.000 euros, más caro que un 718 Spyder RS actual si quiere una comparación.
Si lo que quiere es un sleeper para sorprender a más de uno, solo este Beetle es capaz de darle esa sensación, incluso por encima del 718 más potente en la actualidad.
