Vuelve la categoría reina a nuestro cronograma tras una pretemporada movida con fichajes sorpresivos, rumores de espionaje y hasta de acoso. La temporada 2024 de F1 arrancó este fin de semana y algunos alcanzamos a ilusionarnos pues los Red Bull parecían tener problemas mientras Ferrari, Mercedes y hasta Visa CashApp RB lideraban las prácticas en Baréin. La clasificación, sin embargo, fue casi idéntica al año pasado; con Max Verstappen en la punta, Sergio Pérez cediendo terreno a los Ferrari y Nico Hülkenberg décimo.
Cuatro meses de expectativa se evaporaron en una primera vuelta que tuvo dos eventos notables. Perez y George Russell, por un lado, adelantando a Sainz antes de la primera curva e intentando desafiar a Verstappen. Por otro lado, un incidente entre Lance Stroll y Hülkenberg que obligó al alemán a parar en pits para remplazar la trompa de su Haas. Russell no perdió tiempo y adelantó a Leclerc en la tercera vuelta, pero Verstappen empezó —como siempre— a sacar distancia mientras George, Checo y los Ferrari peleaban detrás.
¿Un inicio prometedor?
En la séptima vuelta Pérez adelantó a Leclerc, los frenos delanteros del piloto monegasco bloqueando sus llantas por segunda ocasión en tan poco recorrido. Y mientras Logan Sargeant salía de pista causando una bandera amarilla en el primer sector, Sainz también adelantó a Leclerc en una apretada maniobra que seguro hizo apretar los dientes a Fred Vasseur. Las paradas en pits empezaron en la vuelta doce, con Russell como el primero de los punteros en detenerse, seguido por Leclerc, dejando a Pérez segundo y a Sainz tercero.
El español pronto paró y salió detrás de su compañero de equipo, pero necesitó pocas vueltas para alcanzar y adelantar nuevamente a un Leclerc emproblemado con los frenos de su SF-24. Problemas técnicos también aquejaron al F1 W15 de Russell que reportó problemas de temperatura momentos antes de que Sainz también lo adelantara. Verstappen entró a pits solo hasta la vuelta diecisiete, treinta segundos por delante de Pérez y salió cómodamente a retomar la punta. La estabilidad llegó a la mitad de la carrera con Russell empezando otra tanda de paradas en boxes mientras Fernando Alonso, Lewis Hamilton y los dos McLaren se mantenían constantes detrás de los punteros.
¿O «2023 parte 2: Bugalú eléctrico»?
Un error de Russell en la vuelta cuarenta y siete permitió a Leclerc tomar el cuarto lugar, aunque la diferencia con el tercero —su coequipero Sainz— ya rondaba los diez segundos. Así se mantuvieron las cosas durante la última etapa de la carrera, con ambos Red Bull tranquilos en la punta: Verstappen veinte segundos delante de Pérez y este unos cuatro segundos delante de Sainz. ¡Y eso sacándole casi la misma duración a los neumáticos blandos que otros equipos le sacaron a los duros! El resultado final fue un dominio absoluto de Red Bull con el actual campeón llevándose también la vuelta más rápida (1:32.608 contra 1:34.090 de Leclerc) y Sainz completando el podio como piloto del día (31.4% de los votos).
Leclerc pudo sortear su problema de frenos y quedó cuarto, seguido por Russell, Lando Norris, Hamilton, Oscar Piastri y los Aston Martin completando el Top 10. ¿Conclusiones? Queda todo 2024 por delante y cualquier cosa puede pasar en la F1, pero a juzgar por Baréin las novedades serán pocas. Un Ferrari más brioso, pero con tensiones internas; McLaren perdiendo impulso y compitiendo con Mercedes; Sauber, Williams, Haas y RB aprovechando mientras Alpine hace implosión. Nos vemos dentro de ocho días en Arabia Saudita y esperemos que el circuito de Jeddah con sus tres zonas de DRS nos dé algunas emociones.
