Déjeme decirle algo: el Grupo B es el capítulo más fascinante del automovilismo. En tan pocos años cautivó por la locura de las máquinas que nacieron de estas normativas, la gran sensación de peligro y velocidad, en fin. Muchas marcas quisieron subirse a este “bus”, entre ellas Ferrari, Toyota y la protagonista de hoy. Alfa Romeo también tuvo un proyecto fallido del Grupo B, que renace cuatro décadas después como el Alma Sprint.
No, no es un proyecto sancionado por la marca italiana, sino por un preparador portugués. Se llama Mecánica Alma y su idea es ofrecer su propia interpretación del Alfa Romeo Alfasud Sprint que buscó participar en esa era del Grupo B. Proyecto que nunca ocurrió y es por eso que este preparador quiere ofrecernos la posibilidad explorar qué hubiese ocurrido de materializarse.
El Alfa de rally que no fue
En otras palabras, es un restomod, como los Kimera EVO37 y EVO38. Como todo en esa era del Grupo B, el proyecto de Alfa Romeo era descabellado y tenía el motor atrás. Autodelta, rama de competencias de Alfa Romeo, se encargó de crear al Sprint 6C, versión que recibía el V6 de 2,5 litros presente en el GTV6, ubicado sobre el eje trasero. La suspensión fue mejorada, la carrocería ensanchada y se agregó un alerón y nuevas tomas de aire.
Eso para la versión de homologación para calle. El prototipo de rally era más descabellado con una potencia por encima de los 300 caballos, el doble que el Sprint 6C. Sólo dos prototipos se completaron, luego de que el proyecto colapsara.
Reinterpretando ese proyecto del Grupo B
Aquí es donde entra Mecanica Alma, quienes deciden ofrecer su propia versión del Alfa Romeo Sprint 6C, con componentes actualizados y comodidades modernas.
Alma decide optar por el motor del Alfasud Sprint original, una unidad bóxer de 4 cilindros opuestos, con pistones forjados, nuevas culatas, árbol de levas y cigüeñal al igual que dos carburadores de dos bocas Dellorto con “trompetas”. Sus 158 hp igualan la figura del Sprint 6C de calle original, pero con este poder viajando a las ruedas delanteras cortesía de un diferencial Torsen LSD y una transmisión mecánica de 5 marchas.
Con solo 880 kg de peso, el Alma Sprint es bastante ágil. Lo ayuda su suspensión ajustable y frenos de disco en las cuatro ruedas, mientras que la banda sonora es cortesía de un escape en acero inoxidable. Alma replica el estilo fastback del Sprint 6C, con un gran parecido al Audi Quattro, incluyendo un alerón, ligero splitter frontal y pasos de rueda ensanchados.
Luces LED encajan en los faros redondos del Sprint original, mientras que la cabina mezcla sillas tipo cubo Sabelt, un volante Zagato y un cuadro de instrumentos restaurado. Un sistema de audio Bluetooth pone la cuota moderna del proyecto.
No luce para nada mal, en especial por ser más fiable y moderno que cualquier otro Alfa Romeo clásico. Alma planea realizar 20 de estas conversiones, con todo un abanico de opciones personalizadas para cada dueño.
