Hace tres décadas Kia sorprendió al mundo con su primer modelo relativamente propio: la Sportage. Sí, compartía chasis con un camión ligero de Mazda, tenía un estilo que evocaba a un Jeep y pertenecía a una marca que aún era desconocida para Occidente. Pero la Sportage fue todo un éxito y hoy en día sigue muy fuerte. Para celebrar esos 30 años Kia decidió hacer algo especial por la Sportage.
Es una edición conmemorativa que si bien fue lanzada en Corea del Sur, no sería descabellado que se extienda a todo el mundo. Basada en la Kia Sportage NQ5 de chasis extendido (LWB) esta celebración de sus 30 años es lo que se imagina. Retoques estéticos, materiales más elegantes, insignias especiales, en fin. No nos adelantemos y exploremos todo lo que ofrece esta camioneta especial.
Un clásico retoque estético
En el exterior los cambios son más bien sutiles. Hay rines negros especiales de 19 pulgadas y una pintura gris oscura mate diferente a las estándar. Mecánicamente tampoco hay cambios, al menos para las versiones tope de la Sportage con propulsión turbocargada e híbrida, con 227 o 261 caballos de potencia.
Su interior es donde hay un alto grado de exclusividad y detalles, como las sillas con gamuza y cuero verde repujado con un patrón en forma de rombos con sutiles costuras del mismo color. Los apoyacabezas tienen marcado el nombre de la Sportage y el número 30 y muchas de las molduras interiores fueron oscurecidas.
En Corea del Sur esta Sportage aparece junto a su predecesora original, restaurada por Kia para celebrar esos 30 años. Kia no lo confirmó, pero el modelo podría llegar a Estados Unidos de alguna manera u otra, nación donde usa un motor 2.5 atmosférico. En cuanto a la versión corta que reciben la mayoría de mercados latinoamericanos, es incierto si veremos este tratamiento de aniversario a la icónica Sportage.
