Para aquel que cree que el Mazda Miata 12R Spirit Racing es el MX-5 más potente de la historia, sí y no. Es un título compartido y no precisamente con el Mazdaspeed MX-5 turbo hace 20 años. Revelado en el Auto Salón de Tokio, esta edición limitada del Miata (o Roadster) de cuarta generación es, posiblemente, la versión definitiva que veremos en este ciclo del pequeño deportivo.
Además, sirve como lanzamiento de esta división Spirit Racing, que asume el lugar de Mazdaspeed. Forjado en el Super Taikyu por el equipo Spirit Racing (obviamnte), el Mazda Miata 12R no sólo tiene más poder, también tiene un par de juguetes extra bajo la piel.
El Miata definitivo de esta generación
La filosofía del Miata no cambia: tracción trasera, dos plazas, motor frontal, transmisión manual y un peso por debajo de los 1.200 kg. Fórmula que esperamos siga por toda la eternidad, con o sin electricidad respirándonos en la nuca.
Para lograr el tratamiento 12R Mazda Spirit Racing emplea una nueva culata, válvulas, árboles de levas, pistones y cilindros específicos de este Miata. Ello, junto a un escape menos restrictivo y un ECU elevan el poder del motor 4 cilindros 2,0L aspirado de 181 a 197 caballos de potencia. O 200 PS si lo prefiere, igualando la cifra del MX-5 SP turbo NB revelado hace 24 años.
La transmisión es manual de 6 marchas (como debe ser), los frenos Brembo tienen discos más grandes y la suspensión posee amortiguadores ajustables. También se asoma un bodykit con toques en color negro, butacas tipo cubo con acentos rojos, alerón trasero y rines forjados RAYS.
Se harán sólo 200 ejemplares del MX-5 12R, exclusivos para Japón. Aunque una edición similar podría lanzarse de forma global, antes de poner punto final al ciclo del Miata ND. Ahora, si tan solo Mazda ignorase esa transmisión automática que limita al Miata en tantos mercados y ofreciese ambas opciones.