Hyundai ha dado un paso más hacia la consolidación de su división deportiva con la llegada del Hyundai Ioniq 6 N, la versión de alto rendimiento de su elegante sedán eléctrico. Luego del éxito del Ioniq 5 N, era solo cuestión de tiempo para que la marca coreana aplicara la misma fórmula al Ioniq 6.
El resultado es una berlina eléctrica que no solo respeta la estética futurista del modelo base, sino que la potencia con una actitud agresiva y un desempeño digno de la letra N. Su presentación se dió en el Festival de la Velocidad de Goodwood, en Inglaterra.
Diseño aerodinámico y elegante
Desde su concepción, el Hyundai Ioniq 6 ya era rompedor, con líneas fluidas, perfil tipo fastback y un enfoque aerodinámico extremo. Pero la versión N lleva esta silueta a un nuevo nivel. En el frente resalta una gran «cara» en negro brillante que le da robustez al andar. Para dar esa esencia deportiva destaca una línea en rojo sobre el bumper y la insignia «N» sobre la parrilla.
Lateralmente es evidente que la línea de un sedán aerodinámico no se pierde, sin ser muy diferente al modelo convencional de este sedán eléctrico. Para esta version «N» del Hyundai Ioniq 6, resaltan los pasos de rueda mucho más anchos, faldones laterales y rines de 21 pulgadas.
En la parte trasera muestra una estética más ruda y mejorada, sin ser futurista, con una gran parte en negro brillante. Acompañado de un spoiler totalmente funcional que optimiza la carga aerodinámica y reducir el arrastre. Hacia el interior incorpora asientos tipo bucket, volante N, pantalla dual configurable y modos de conducción inspirados en circuitos.
El Hyundai Ioniq 6 con la deportividad motriz «N»
Este Hyundai Ioniq 6 N esconde un tren motriz eléctrico para cada eje. Entrega una potencia combinada cercana a los 641 Hp, con un torque instantáneo que supera los 770 Nm. Esta configuración le permite acelerar de 0 a 100 km/h en menos de 3,5 segundos. Estos dos motores se alimentan por una batería batería de 84 kWh. La autonomía no ha sido revelada, pero se aproxima a los 459 kms en ciclo WLTP.
Incorpora un sistema de tracción integral, vectorización de torque, y un exclusivo «N Drift Mode», ideal para quienes buscan una experiencia de manejo más radical. A esto se le suma una transmisión «N e-Shift» que simula una caja de doble embrague de ocho velocidades. Complementado con el sistema de sonido artificial del motor «N Active Sound+«.
La suspensión se controla y se adapta electrónicamente mediante sensores, enlazados directamente con los modos de manejo. Para poder mantener estos niveles de potencia y torque, se mejoró el sistema de refrigeración. Todo esto gracias a entradas de aire mejoradas para el mantenimiento de la temperatura en la batería y motores, cuando se exige en pista.
El Hyundai Ioniq 6 N no es solo una variante más potente de un eléctrico. Es una muestra clara de que los deportivos del futuro no tienen por qué renunciar a la emoción. Combina diseño, tecnología y prestaciones en un paquete que desafía a rivales de segmentos superiores.
