Ferrari 849 Testarossa
- Publicidad -

Ferrari siendo Ferrari no quiso realizar su gran revelación en el Salón de Múnich 2025, sino que en un evento exclusivo en Milán, la clavó al ángulo con la presentación del nuevo 849 Testarossa, un superdeportivo que retoma uno de los nombres más emblemáticos de la historia de la marca para redefinir la línea de rendimiento de la marca italiana en los próximos años.

Este modelo llega en versiones Coupé y Spider para reemplazar al aclamado SF90 Stradale. Con unas dimensiones de 4.71 metros de largo y una estética inspirada en las divinas berlinettas de la década de 1970, el nuevo Testarossa rinde homenaje al pasado sin perder su espíritu futurista. La carrocería, evaluada y trabajada por el jefe de diseño Flavio Manzoni, luce una agresiva silueta que recuerda al Ferrari F80, marcando la pauta para los próximos modelos de la firma de Maranello.

Un motor de infarto y prestaciones demenciales

El corazón del Ferrari 849 Testarossa es un motor PHEV (híbrido enchufable) que combina un motor principal V8 biturbo de 3.990 cc y 819 HP, con tres motores eléctricos que añaden hasta 216 HP adicionales. El resultado es una potencia total de 1.036 HP, una cifra que supera al Stradale (que finalizó su producción en 2024) y que también deja en el polvo a las prestaciones del mítico LaFerrari.

Con esta potencia, el deportivo acelera de 0 a 100 km/h en menos de 2.3 segundos y alcanza los 200 km/h en apenas 6.5 segundos. Su velocidad máxima supera los 330 km/h. Incluso, a pesar de este derroche de poder, la batería de 7.45 kWh le permite recorrer hasta 25 km en modo 100% eléctrico.

Dicho esto, el poder del Testarossa también se da en sus sistemas electrónicos, donde estrena el sistema FIVE (Ferrari Integrated Vehicle Estimator), que utiliza la electrónica para anticipar los movimientos del conductor y adaptar el chasis y la tracción integral a las condiciones futuras. Además, cuenta con un sistema de frenado de alto rendimiento y una aerodinámica activa que genera una carga total de 415 kilos a 250 km/h, garantizando un rendimiento y una seguridad excepcionales.

Tecnología de competición en una cabina tradicional

El interior del 849 Testarossa adopta un diseño minimalista, inspirado también en el del F80, con el puesto de conducción y el del copiloto bien diferenciados. Los asientos deportivos, el volante con botones físicos y una suspensión activa que ofrece un toque de confort, demuestran que el vehículo ha sido concebido para el disfrute en carretera a pura velocidad.

De igual manera, este modelo no sería un Ferrari si no ofreciera una amplia gama de opciones de personalización diseñadas para realzar el carácter deportivo y la identidad del vehículo. Entre las innovaciones más significativas se encuentran dos nuevos colores desarrollados específicamente para la ocasión: Rosso Fiammante, una evolución tecnológica del histórico tono pastel Rosso Corsa y Giallo Ambra, un tono intenso y cálido con matices rojizos, inspirado en la profundidad y la riqueza cromática del ámbar natural.

Para el interior, se introdujo un nuevo acabado en Alcántara, llamado Giallo Siena, diseñado para armonizar con el exterior Giallo Ambra. Este tono refinado y deportivo ayuda a crear un ambiente moderno y, al mismo tiempo, relajante en el habitáculo. Las llantas forjadas, desarrolladas en estrecha colaboración con el departamento de aerodinámica, también son personalizables. Sus sofisticadas geometrías permiten elegir entre diferentes configuraciones, adaptando la estética al gusto personal.

Santiago Rangel Alarcón
Apasionado por la F1, la música y la tecnología en vehículos. ​🏎️

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí