Un aspecto que a veces pasa desapercibido en torno a los pilotos de Fórmula 1 es su habilidad en otros deportes. De forma más específica, muchos de ellos brillan en actividades físicas de todo tipo, particularmente ciclismo. Como ninguno de nosotros mortales tenemos dinero para un monoplaza de F1, mucho menos un exótico británico, lo más cercano para ser felices es esto: una bicicleta eléctrica con el sello de McLaren.
Espere un segundo, ¿McLaren hace bicicletas? A partir de ahora, sí. Si quiere ir a ese extremo, este es técnicamente de los primeros vehículos 100% eléctricos de la casa motriz con base en Woking. Además de ser la primera bicicleta de McLaren que, técnicamente, es más utilitaria que su rango de exóticos y deportivos.
El toque de McLaren… ahora en dos ruedas
Eso es porque es una bicicleta de montaña (o todoterreno si lo prefiere así). McLaren las denomina “híper bicicletas” y es una serie de cuatro modelos distintos y utilitarios con diferentes niveles de potencia y batería; aunque ambas tienen cinco modos de manejo.
McLaren divide su bicicleta eléctrica en dos variantes: Extreme y Sport. El modelo 250 tiene, de forma apropiada, un sistema eléctrico de 250 watts y es capaz de producir 121 Nm de torque, alimentado por una batería de 15 amperios. La variante tope de gama posee un motor de 600w, 161 Nm de par motor y un sistema de 48 voltios. Considerando que un ciclista profesional puede producir hasta 500w, esta última versión es bastante poderosa.
Las dos versiones de esta “bicicleta color papaya” poseen una transmisión de 12 velocidades, adaptada para ciudad o montaña. Los amortiguadores son firmados por RockShox, las llantas por Pirelli y el marco (o chasis) es en fibra de carbono para mayor ligereza y robustez.
Como es de esperarse, estas bicicletas son bastante exclusivas. $8.000 dólares es el valor de la versión 250, con las más poderosas Extreme o Sport 600 superando los 11.000 dólares americanos. Exclusiva sí, pero no es un precio descabellado en el curioso mundo de las bicicletas de alto desempeño.