Desde hace siete años, los estudiantes de la Skoda Academy Skoda realizan un proyecto interesante. Para terminar su formación profesional, los alumnos diseñan un concept car tomando como base un auto de producción de la empresa checa. El proyecto, llamado Azubi Car por la Skoda, ha tenido gran impacto y este año los 31 estudiantes participantes nos presentaron este speedster bautizado Slavia. En esta ocasión tomaron como base el Skoda Scala y se inspiraron en el Skoda 1100 OHC de 1957, dando vida a un descapotable de lo más curioso. Su nombre, Slavia, es una referencia histórica: así se llamó la primera bicicleta fabricada por Václav Laurin y Václav Klement, los fundadores de Skoda. Eso fue hace 125 años y el Skoda Slavia es la forma perfecta de celebrarlo.
Un proyecto para la hoja de vida
La tesis nunca es fácil, pero debe ser bastante desafiante tener como proyecto final transformar por completo un auto. Para darle vida a este descapotable, los estudiantes reforzaron el chasis, cambiaron el sistema de escape, retiraron el techo, y soldaron las puertas traseras. Enfin, convirtieron un compacto de cinco plazas en un descapotable de dos asientos y dos puertas: «breve«. Claramente, lo que más llama la atención son las dos jorobas detrás de los asientos que, junto a un alerón de dimensiones generosas, dan esa imagen deportiva y atlética al Skoda Slavia Concept.
El exterior cuenta con rines de 20 pulgadas procedentes del Skoda Kodiaq y un sistema de frenos heredado del Octavia RS. La carrocería exhibe un color blanco cristal contrastado con elementos negro brillante como las carcasas de los retrovisores, el alerón y los faldones laterales. Bajó el piso recibe luces LED que alumbran con los colores de la bandera checa (azul, rojo y blanco). Los estudiantes le dieron un toque deportivo a la cabina con asientos Sparco en cuero perforado y arneses de cuatro puntos; además, incorpora instrumentación digital Virtual Cockpit y un avanzado sistema de sonido. Como si fuera poco, en el maletero lleva dos scooter eléctricas plegables de Skoda para realizar el trayecto final.
Propulsando al pequeño speedster encontramos un motor TSI de 1.500 cc y 148 HP unido a una caja de 7 velocidades de doble embrague. Esto sería suficiente para ofrecer buenas prestaciones considerando que el Slavia pesa apenas 1.210 kilogramos. Sin embargo, y podrá haber sospechado desde el principio, no es un vehículo de producción en serie. Lástima, pero al menos el Skoda Slavia fue un gran ejercicio para sus estudiantes y, además, un prometedor inicio para sus carreras trabajando con la casa checa…