El regreso de la Fórmula 1 a Spa-Francorchamps no decepcionó. Max Verstappen dominó el Gran Premio de Bélgica casi de principio a fin, sin importar que empezara en el puesto 14. Red Bull y Sergio Pérez también demostraron que están en buena forma, pues el mexicano se quedó con el segundo puesto. La estrategia del equipo con ambos pilotos fue impecable, nada raro que reportar aquí. Carlos Sainz Jr. logró sobrevivir a la embestida del equipo del toro, pero se tuvo que conformar con la tercera plaza.
Un inicio caótico
Con una parrilla que casi estaba invertida, no es sorpresa que el inicio del Gran Premio de Bélgica fuera todo un caos. Sainz estaba en la cabeza del pelotón, pero empezaron a cazarlo desde el inicio. Fernando Alonso superó a Sergio Pérez casi al instante, mientras que el mexicano cayó al quinto puesto, pero en medio del caos volvió al segundo puesto de manera sorprendente. Verstappen superó a varios pilotos y nadie en las tribunas sabía qué batalla seguir.
Eventualmente, todo este caos dejó una víctima: Lewis Hamilton. Alonso, quien había caído de vuelta en la tabla de posiciones, estaba tratando de superar a Hamilton, pero este lo cerró de manera imprudente. Alonso lo golpeó con su neumático delantero e hizo que el monoplaza del inglés saltara violentamente. Poco después, el Mercedes-AMG tiró la toalla por los daños del salto. Para este entonces, Verstappen ya había escalado al puesto 8 y esto apenas iba en la segunda vuelta.
La calma después de la tormenta
Apenas un poco más adelante, un inesperado toque entre Latifi y Bottas causó un auto de seguridad. El Alfa Romeo se quedó atascado sobre una trampa de arena y Bottas pasó su cumpleaños mirando de lejos la carrera. El auto de seguridad duró hasta la vuelta 5, suficiente para que las cosas se calmaran un poco en la pista. A partir de ahí, Verstappen empezó a subir más puestos, empezando por Ricciardo, alcanzando la sexta casilla. Albon, quien había tenido un sorprendente desempeño en la calificación, también rebasó al australiano.
Llegamos a la vuelta 7 y Verstappen superó a Vettel, ubicándose en el quinto puesto, luego pasó a Alonso y a Russell. Ya solo faltaban su compañero y Sainz, pero Ferrari se encargaría de facilitarle las cosas a los de Red Bull. El equipo llamó a Carlos Sainz para cambiarle las llantas y por eso cayó al sexto puesto. Pérez heredó la punta, pero Verstappen estaba deseoso por llegar al frente. El holandés llegó al frente de la parrilla en solo 12 vueltas, casi un puesto por vuelta.
Los extras de la película
Luego de llegar a la punta, Max Verstappen no tuvo competencia y se dedicó a aumentar la distancia respecto a su compañero. De paso, se ganó el punto de la vuelta rápida y el del piloto del día, así que se llevó todo. A estas alturas detrás de él no ocurrió mucho. Carlos Sainz se mantenía como podía en el podio, Russell no pudo desbancar a nadie y Leclerc no pudo subir del cuarto puesto, terminando de sexto, aunque arrancó en el puesto 15. Alonso no dio lo que se esperaba de él, ya que muchos apostamos a que ganaría esta carrera, pero acabó de quinto. Si algo nos queda, es que el Gran Premio de Bélgica fue otra demostración del poder de Red Bull. ¿Estarán persiguiendo todos los logros de Mercedes-AMG?