La calidad del aire y el medio ambiente es un tema que no se debe negociar hoy en día; aún más cuando las cifras de contaminación en las ciudades capitales va en aumento. Desde hace muchos años la nube negra que se posa sobre Bogotá estaba presente; no más bastaba con subir a Monserrate o a un edificio alto para notarla. Este 2020, con la llegada de la alcaldesa Claudia López, el tema tomó gran importancia, tomando cartas en el asunto; en entre esas un Pico y Placa ambiental, que prometía bajar los índices del material particulado 2.5 en Bogotá. Hasta el sol de hoy, nada ha sucedido.
El fin de este artículo no es buscar culpables, es buscar soluciones de fondo, donde todos los Bogotanos y habitantes de la ciudad, incluido usted; ayude a mejorar a un mediano plazo la contaminación y el medio ambiente que todos respiramos. La medida de pico y placa en un comienzo funcionó, siendo esta orientada a mejorar la movilidad; hacia el año 1998 el ambiente era un tema ajeno para la alcaldía. Con el paso de los años, esta medida a corto plazo ocasionó que la ciudadanía adquiriera mas vehículos, debido al precario y deficiente servicio público de Bogotá (20 años después hay más líneas y más gente, así que sigue siendo precario).
Claramente al haber mas vehículos y motocicletas como consecuencia de esta medida obsoleta, hay más fuentes móviles que funcionan con combustibles fósiles que emiten carbono y sustancias perjudiciales para la salud. La pregunta radica en ¿Realmente los vehículos a gasolina (particulares) y motocicletas contaminan al punto de ser la primera fuente en culpabilidad de la contaminación?
El único que no entiende sus propias cifras es el distrito
La respuesta a la pregunta anterior es «NO»; las fuentes móviles a gasolina contaminan menos de un 10% tanto vehículos particulares, como motos. La fuente que mas contamina en Bogotá son los vehículos de carga y buses, aportando más de un 40%; sin contar el servicio del SITP que aunque intenten tapar las cifras diciendo que la nueva flota contamina un 0.98%, eso no es cierto. Desde que un vehículo sea Diesel siempre aportará más carbono y material particulado al ambiente por la forma de detonación y quema del combustible.
Una muestra de las cifras amañadas de la Secretaría del Medio Ambiente y la Alcaldía de Bogotá fue el pasado dia sin carro llevado a cabo la primera semana de Febrero; donde por primera vez, la contaminación de PM10 y PM2.5 aumentaron, en vez de disminuir por la salida de mas de 2.5 millones de vehículos. Con esto ya da una alarma de que algo anda mal. La alcaldía intentó poner un tatequieto a los vehículos de carga, siendo los que más aportan aires contaminados, incluso si están repotenciados. Lo consiguiente ocasionó un paro de transportadores, donde los intereses personales velaron por encima de la ciudadanía.
La culpa es del más «pendejo»
Posteriormente a esto, había que buscar una fuente con la cual justificar la contaminación de la ciudad –¡Claro! los que nunca protestan ni dicen nada– los carros particulares. Desde el viernes 6 de marzo se decretó un Pico y Placa ambiental para Bogotá, donde el fin de semana no se podía sacar los carros impares el sábado y los pares el domingo. La medida no cayó mal entre la gente; se tomó con calma por querer ayudar al ambiente. La semana siguiente esto continuó, pasando a ser un tema secundario gracias al Coronavirus.
Los días pasaban y pasaban, sin tener una razón precisa de la alcaldía; todos los días decían que no mejoraba, que aun habian dos estaciones en amarillo; así fue hasta el día miércoles 11 de marzo. La sorpresa llegó el día viernes 13 de marzo donde luego de 8 dias de restriccion, 3 estaciones estaban en amarillo. ¿A qué lleva a pensar esto? Que los carros particulares y las motos no son el problema.
El problema viene de las industrias sin control y un servicio público antiguo; no hay que ser muy inteligente ni estudiado para darse cuenta que la Estación Sevillana (donde hay un buen número de fábricas) y la Estación Chapinero, ubicada en la Séptima con 60 (donde hay paso de Servicio público provisional, SITP y buses duales) son las que siempre están afectadas por los motivos ya expuestos, mas no por los vehículos particulares. En la zona norte y occidental, donde más circulación de vehículos particulares hay, las cifras siempre se han mostrado en verde.
¿Qué hay detrás de todo esto?
Los tintes políticos ante estos casos quedan atrás, acá salen a relucir los beneficios del poder. El próximo 3 de abril, se habilitará el pago del «Pico y Placa Solidario», donde los ciudadanos pueden pagar una suma que ronda los 2 millones y medio de pesos para tener la libertad durante 6 meses de sacar el carro todos los días. La cuestión en este caso esta, ¿No será que el distrito quiere cansar a las personas y obligarlas a pagar esta cifra para evitar el Pico y Placa ambiental? Aún no se sabe y esta redacción no quiere pensar mal, pero al querer seguir culpando a los carros particulares de la contaminación en la ciudad, da un indicio que el tema va por ese rumbo.
Por otro lado, ¿Qué ocurre con las revisiones tecnicomecanicas? Se supone que la gran mayoría de carros tiene un certificado de gases vigente, donde certifica y constata que esta en optimas condiciones de emisiones. Si es así, entonces ¿Por qué se le echa la culpa al carro particular? Tal vez porque es la fuente que es mas eficiente en pagos de comparendos y entrada fiscal al distrito (es solo una idea del redactor, no representa la del medio que representa).
Terminemos sin concluir
Está claro que los carros particulares son el cochinito de hacer plata, además de ser el títere que el distrito mueve a su acomodo, porque dudo que los conductores se unan para hacer un paro ante estas medidas restrictivas. Por otro lado, las fuentes fijas como fábricas y móviles como servicio público tienen que tener un control y usted como ciudadano tiene el derecho de exigir que se lleven a cabo los mantenimientos y controles rigurosos para el bien del medio ambiente y del aire que todos respiramos.
Si bien, con este artículo y el inconformismo de la ciudadanía no se va a retirar la medida porque ante decreto de alcaldía es muy poco lo que se puede hacer. Pero lo invitamos a que no trague entero y no crea en todas las mentiras que se dicen en cifras amañadas para perjudicar a los que menos pueden defenderse. Usted paga por un derecho a la movilidad que se llama «Impuesto a la movilidad»; constitucionalmente usted tiene el derecho a la libre locomoción; el distrito no puede obligarlo a tomar servicio público si no lo quiere; aún mas ante la contingencia del Coronavirus. Evalúe la situación y de una forma pacífica, civilizada y coherente muestre su inconformismo (compartiendo este articulo puede ser una opción).
De regalo le dejamos la seriedad con la que la Secretaría del Medio Ambiente toma la situación del Pico y Placa Ambiental.
Finalmente la medida se mantiene indefinidamente, así que no lo coja un policía por sorpresa y se lleve su comparendo por «contaminar», digo por infringir el pico y placa.
O más bien es que transmilenio y el sitp están quebrados y nos quieren obligar a usarlo para «no contaminar»