No sería el salón del automóvil de Los Angeles sin noticias de alguno de los tres grandes de Detroit. En este caso, y siguiendo con los lanzamientos de alto octanaje, se trata del Challenger 50th Anniversary; una edición especial de uno de los muscle cars más icónicos de Dodge. Tal como la edición Daytona del Charger Hellcat, los cambios no son demasiado extremos, pero tampoco se limitan a un par de emblemas brillantes. Veamos entonces qué ofrecerá Dodge para las bodas de oro del Challenger…
¿Cuál era la receta original?
Para Dodge, un rasgo característico del Challenger que se estrenó en 1970 era que ofrecía una gama de propulsores mucho más amplia que sus competidores. Uno podía comprar un Challenger con el humilde seis cilindros Slant Six de 225 pulgadas cubicas y encontrar varias opciones hasta llegar al legendario elefante, el Hemi 426. Eso sí: independientemente del motor, todo Challenger salía de la fábrica lleno de actitud y pintado en colores tan extravagantes que solo tenían sentido en los 70s. Esa misma receta es la que Dodge está empleando hoy, casi cincuenta años después.
Esta edición especial, que viene en forma de paquete de equipamiento opcional, estará disponible para las versiones GT (solo la tracción trasera), R/T, R/T Scat Pack y R/T Scat Pack Widebody. El paquete costará US$5.495 para la versión GT, US$5.495 para la versión R/T y US$5.995 para las versiones Scat Pack. Los principales cambios del Challenger 50th Anniversary Edition están en tres frentes: colores exteriores de alto impacto, capó con entrada Shaker, rines atractivos y un interior con detalles especiales. Sin embargo, solo las versiones R/T equipadas con el motor Hemi V8 traerán el capó Shaker tan característico en los Challenger de antaño. Este, a su vez, incluye una entrada de aire frio con filtro de aire cónico Mopar para que el motor 5.7 respire mejor.
Color, contrastes y comodidad
Lo que sí traerán todas las versiones es un llamativo exterior: el techo y el baúl están pintados en negro para mayor contraste. Se ofrecerán siete colores diferentes de pintura, todos inspirados en el Challenger original: Gold Rush (exclusivo a esta edición especial), Hellraisin, Sinamon Stick, TorRed, F8 Green y Go Mango. Las placas conmemorativas que identifican esta edición irán en la parrilla, el alerón y los guardafangos delanteros; todas terminadas en color Gold School al igual que los rines. Las mordazas de freno Brembo, opcionales en las versiones GT y R/T, también reciben un elegante toque de pintura plateada. Los modelos equipados con las farolas delanteras Air Catcher también traen logos iluminados alusivos al aniversario.
En el interior, los cambios se extienden al timón, el panel de instrumentos, las carteras de las puertas, los espaldares, los tapetes y hasta las imágenes en las pantallas. Los asientos, con calefacción y ventilación, en Alcántara y cuero Nappa en material negro mantienen el contraste del exterior. Además, están cosidos con hilo color sepia, un detalle que se extiende por todo el interior al igual que los logos “50”. Las versiones Hellcat y Hellcat Redeye no están incluidas, pero Dodge afirma que todas las unidades 2020 de estas versiones traerán también placas conmemorativas. Se fabricarán solo 70 unidades de cada color y de cada versión del Challenger 50th Anniversary Edition para un total de 1960 unidades.
El Dodge Challenger 50th Anniversary se podrá ordenar a partir de finales de 2019 y las entregas empezarán en la primavera de 2020.