Pocos modelos en la historia pueden darse el lujo de llegar al medio millón de unidades. Mucho menos una camioneta con orígenes militares, que se transformó en un 4×4 para un nicho muy reducido y luego un ícono de fama y poder. Aspectos que combinados no dan para producir tantos modelos, pero tenga en cuenta que tuvieron 44 años para hacerlo. El eterno Mercedes-Benz Clase G llegó al medio millón de unidades producidas, y lo celebró con un ejemplar muy especial y retro.
Es irónico, porque el diseño de un Clase G moderno es lo más retro que se puede ser, tan solo el interior tiene esos toques modernos. Y lo que hizo Mercedes-Benz para celebrar esa unidad medio millón es crear un Clase G retro inspirado en los primeros ejemplares que produjo Steyr y la marca alemana en 1979. Es decir, es un Clase G retro al cuadrado, o retro² así como su rudo 4×4². Honestamente nos gusta, y podría ser un paquete de apariencia que se ofrezca oficialmente con el Clase G.
44 años y 500.000 Clase G después…
Por esa última frase usted sospechará que este es un modelo conmemorativo único, y tiene razón. Solo existirá uno, con esa pintura verde militar, frente oscurecido imitando el plástico y aire utilitario del primer Geländewagen. Hasta el exterior parece más simple, con molduras negras, rejilla de techo y una escalera para ascender a esta. Hay una simplicidad especial en este Clase G en particular, que no replican otros modelos de la misma familia en la actualidad.
Mercedes-Benz nos dice que usa de inspiración un 280GE modelo 1986, y no sabemos por qué razón en particular. La tonalidad se conoce como verde agave, los indicadores de dirección son ámbar como el modelo original (W460) y los faros delanteros tienen rejillas protectores, como un 4×4 de vieja escuela. Hasta la cubierta de la llanta de repuesto se ve retro, a pesar de que es bastante simple y solo tiene el logo de Mercedes-Benz.
Lo que es un crimen es que no nos dejaron ver el interior, que según la marca luce tapicería con una tela especial y un patrón a bandera de cuadros. La manija frente al asiento del pasajero tiene la inscripción “No. 500.000” en el verde del exterior. Honestamente si Mercedes-Benz le da por ofrecer un paquete de apariencia retro similar a este como opción, no nos molestaría. En especial para diferenciarlo del EQG eléctrico, que se supone es este 4×4 cuadrado pero futurista, ya que vivimos en una época donde también es grato mirar con agrado al pasado.
