Cuando creímos que el CX-60 sería el modelo “tope de gama” de Mazda en Colombia, van y nos sorprenden con el CX-90. Así es, este buque japonés apareció sorpresivamente en nuestro país, parte de un doble lanzamiento que ahora sí llena el vacío que dejará el CX-9 luego de que sea descontinuado a finales de este año.
De cierta manera podemos decir que tenemos lo mejor de Europa, Japón y Estados Unidos en dos camionetas similares pero con su propia identidad. ¿Por qué similares? Mazda adora su filosofía de diseño Kodo, imagen que fue retocada para la introducción del CX-60 en Europa y luego perfeccionada para el CX-90 pensado para el mercado norteamericano.
Y aunque comparten tren motor y plataforma, el CX-90 deja clara su jerarquía como el modelo más completo en todo el portafolio de Mazda, sin mencionar el hecho de ser su modelo de producción más potente jamás creado.
Una sorpresa japonesa de 5.1 metros
Luciendo una versión retocada del emblemático color rojo de Mazda, denominado artisan red, el CX-90 nos sorprendió en nuestra visita a Bucaramanga, ciudad donde se celebró el lanzamiento del CX-60 en Colombia. Más que ser una evolución del CX-9 que va de salida, el CX-90 es un nuevo vehículo que crece en todo aspecto. Más espacio a lo largo y ancho para sus tres filas de asientos, con 3.1 metros de distancia entre ejes, 2 metros de ancho y una envergadura total de 5.1 metros.
Sus puertas traseras, que abren casi en un ángulo de 90°, revelan una cabina muy espaciosa, con una configuración bien lograda y espacio notable para esa tercera fila. El cuero napa de color oscuro abre paso a una camioneta de tinte muy americano, con muchas gavetas de almacenamiento, sillas tipo capitán, espacio de sobra para siete ocupantes y una presencia que la pone en su propia categoría frente a otros modelos de Mazda en el país. Amenidades como techo panorámico, panel de instrumentos digital, head-up display y un sistema de entretenimiento revisado (12″) todavía con muchos botones físicos complementan esta sensación.
Imponiendo su jerarquía
Lo que mueve al CX-90, al igual que el CX-60 que debutó en Colombia, es la nueva familia de motores de Mazda. Estos tienen seis cilindros, turboalimentación, 3.3 litros de desplazamiento y una potencia que se eleva hasta los 340 caballos; con un torque de 500 Nm. De nuevo tiene asistencia híbrida ligera de 48 voltios y tracción en las cuatro ruedas; junto a una transmisión nueva sin convertidor de torque con 8 velocidades.
El CX-90 cuenta con suspensión independiente en las cuatro ruedas, frenos de disco ventilados y el sistema de estabilización de chasis o control de postura cinemático (KPC), como lo llama Mazda. En pocas palabras es un control activo del balanceo del chasis, manteniendo el aplomo de la carrocería en curvas y permitiendo que la postura de los pasajeros no se vea alterada por el movimiento natural del vehículo en las curvas.
Decir que el CX-90 es el modelo más completo de Mazda en Colombia (y México, donde ya se ofrece) es quedarse corto. Trae todas las asistencias en seguridad i-Activsense, como frenado autónomo, detección de carril, peatones, tráfico cruzado, control crucero adaptativo, entre otros. Sistema de sonido Bose con bajo, muchos puertos USB, aire acondicionado de tres zonas con salidas para las tres filas, acabados de primera, en fin.
Es una excelente apuesta que solidifica ese “salto de estrato” que Mazda quiere dar, y aunque sea una decisión cuestionada la casa japonesa quiere codearse con todas las marcas premium. Con el CX-60 y CX-90 en Colombia, Mazda acaba de dar sus primeros pasos para conseguir ese objetivo, y hay que reconocer que lo hicieron muy bien y a lo grande.
Precio y versiones
- Mazda CX-90 Grand Touring Signature AWD MHEV: $282.600.000.