Cuando el nuevo Suzuki Swift desfiló por el Salón de Tokio con el apellido “concept” todos sabíamos que era su versión final con un nombre bonito. Dicho y hecho, el Suzuki Swift 2024 de producción es idéntico, con la gran novedad siendo que ya conocemos casi todas sus características, como su nuevo motor híbrido. En un mundo en el que los crossovers se apoderan cada vez más de la torta automotriz moderna, el Swift es un valiente ejemplo para demostrarle al mundo que los hatchbacks siguen más vigentes que nunca.
¿Lo ha notado? Por estos días muchos fabricantes están regresando a la idea de tener un diseño atemporal que sea fácil de ajustar y evolucionar sin perder su esencia. Es la noción de concebir una forma tan fácil de reconocer, que de inmediato todos sepan de qué auto se trata. Eso ocurrió con el nuevo Swift, que por fuera si bien tiene un nuevo rostro, preserva una serie de elementos que lo hacen fácil de identificar como un Suzuki y no como cualquier otro vehículo.
Que su exterior siga una línea evolutiva no significa que por debajo todo permanezca igual, porque las entrañas del nuevo Swift son más modernas que nunca.
Motor más pequeño pero más híbrido que nunca
Hablemos de motores, porque el Suzuki Swift 2024 si bien no deja de ser híbrido, si tiene bastantes novedades interesantes bajo el capó. Suzuki estrena una nueva familia de motores más compactos, y por primera vez el Swift deja los cuatro cilindros que lo han motivado toda la vida para usar un propulsor de 3 cilindros y 1.2 litros de desplazamiento.
Si bien Suzuki no quiso revelar su potencia, que debe rondar los 100 caballos, sí confesaron un detalle importante. El nuevo Swift tendrá tracción delantera o en las cuatro ruedas, y dado que la hibridación está sobre la mesa, consideramos que el Swift AWD tendrá un motor eléctrico que mueva el segundo eje. Los modelos más frugales tendrán hibridación ligera optimizada, ojalá integrando un sistema de 48v con frenado regenerativo.
El Swift japonés estará equipado con una transmisión automática CVT, pero el modelo europeo conservará la opción manual de cinco marchas, como puede ver a continuación. Porque un auto así merece ser disfrutado con tres pedales, como todos los city car deberían serlo.
Suzuki nos dice que se enfocó bastante en mejorar el apartado de seguridad. Tenemos asistente de frenado de emergencia con monitoreo de peatones, ciclistas y punto ciego, por ejemplo. También hay detección y mantenimiento de carril, conectividad a través de una aplicación de Suzuki y monitoreo del conductor. Ojalá opciones que no desaparezcan en mercados más emergentes.
Evolución en vez de revolución
En materia de diseño nos topamos con un “autito” que instantáneamente se reconoce como un Swift. Quizá lo más difícil de asimilar en su diseño es el frente, con una fascia que resulta demasiado peculiar con trazos redondeados y suaves que contrastan fuertemente con el resto del Swift. Eso es porque los costados y parte trasera son más bien sencillos, con líneas rectas sin ningún dramatismo, faros traseros convencionales y un techo negro.
Casi se siente como si el frente del Swift perteneciera a otro vehículo. Aun así el Swift resulta llamativo y jovial, como el típico diseño que resulta atractivo para los jóvenes. En la cabina encontramos una filosofía igual de evolutiva, con un cuadro de instrumentos, volante y controles similares a la previa generación, pero con suficientes amenidades para justificar el título “2024”.
La más evidente es la pantalla táctil de 9” flotando sobre el tablero, ahora con conectividad más moderna y más funciones. También el aire acondicionado es automático, y los materiales si bien plásticos lucen dos tonos y acentos cromados para sugerir que el Swift será asequible, pero tiene mucha alcurnia.
El Swift comenzará su invasión europea durante el primer trimestre de 2024, con otros mercados a la espera de una confirmación oficial respecto a su llegada.