Lo que aquí ve es la primera versión de la Toyota Land Cruiser con la hibridación de su lado. Es cierto, no tiene el logo de Toyota y tampoco es una Land Cruiser de nombre, pero cuenta. Salude a la Lexus LX700h, donde la h significa híbrida; presentándose como el pináculo del lujo y el exceso de la marca japonesa que ahora aprovecha que Toyota es líder mundial en hibridación para ser más ecológica.
Es cierto, la LX600 no está mal, pero no salva tanto el ambiente como esta enorme SUV ejecutiva para dirigentes de una compañía multinacional. La versión LX700h híbrida llega como parte de una sutil actualización a todas las versiones de este modelo, que incluye una variante más capaz que Lexus llama Overtrail. Contraste perfecto al lujo que esta camioneta posee a flor de piel.
Buque insignia con mayor voltaje
No solo es la primera vez que existe una Land Cruiser híbrida, también la primera vez que la Lexus LX posee un tren motor de estas características y, a pesar del nombre, LX700h no es indicativo de su potencia. Tampoco su torque, curiosamente, pero 700 es mejor que 600 así que hay que aprovechar el número superlativo.
Lexus toma el V6 biturbo de 3,4 litros de la Land Cruiser/LX600 y lo acopla a un motor eléctrico, que reside junto a la transmisión automática de 10 velocidades. En los LX600/Land Cruiser produce 410 hp, pero gracias a ese “chispazo” adicional la potencia asciende a 479 caballos y el torque a 790 Nm, siempre a las cuatro ruedas.
La marca asegura que este sistema mejora el consumo considerablemente, rozando las 32 a 35 kilómetros por galón que es decente para el tamaño y peso (más de 2,5 toneladas). La batería es compacta y sí permite mover el vehículo en modo eléctrico, aunque no por largas distancias. Como buen producto Toyota, la idea es que ambos motores trabajen de la mano.
Las mejoras y ocurrencias de lujo
Exclusivo de la versión híbrida es un chasis reforzado para acomodar esas baterías y distribuir mejor el peso. También el sistema eléctrico puede mover a la LX700h en condiciones difíciles de terreno, actuando como un sistema crawl con aceleración más precisa. Incluso tiene una batería auxiliar y alternador para encender el vehículo en caso que el componente híbrido falle.
Otras minucias del LX, híbrido o no, incluyen suspensión adaptativa con altura variable, puertos USB-C para la segunda o tercera fila, un head-up display y sillas de masaje con cuero. Para la versión LX700h llega una consola central con refrigeración, la típica nevera de las Land Cruiser si le suena.
Una versión lujosa y capaz
Eso no es todo. Además de la LX700h híbrida, Lexus revela las versiones Overtrail, perfectas para el millonario que no tema ensuciar su camioneta de más de 100.000 dólares.
Esta añade un diferencial con bloqueo central, delantero y trasero, el primero tipo LSD (deslizamiento limitado); además de suspensión levantada, llantas todoterreno y rines de 18” más resistentes, placas de deslizamiento y mayor protección al chasis y componentes mecánicos.
También se añaden mejoras visuales como una parrilla y detalles en color mate, rejillas de carga en el techo, defensas oscurecidas y una cabina con tapicería impermeable y un generador de corriente de 2.400 watts. Si eso no basta, hay insertos de madera real en la consola central y puertas.
Estas son todas las novedades de la familia LX, que casi presagian un futuro híbrido para la Land Cruiser LC300 en algunos meses, quizá con menos aditamentos y una potencia conjunta refinada a 450 caballos. Porque ya Toyota se ha tardado bastante en crear una Land Cruiser híbrida de algún tipo y ese concepto eléctrico todavía está lejos de la producción.