Hace un cuarto de siglo Audi lanzó lo que es quizá su modelo más incomprendido. El A2 no era un modelo premium como tal, sino un ejercicio en ingeniería, eficiencia y diseño; era una de las expresiones más eficientes del motor a combustión, alcanzando fácilmente consumos tan bajos de 2 a 5 litros de combustible por 100 km. Algo así como unos 120 a 180 km por galón. Pues bien, hoy el Audi A2 renace, aunque sea un prototipo único, como un eléctrico hecho por estudiantes.
Si lo piensa, la idea tras el A2 era la eficiencia por encima de todo, reducir emisiones al mínimo, sean emitidas por un motor diésel o a gasolina. Por ello su construcción era casi totalmente en aluminio, su silueta de “minivan” totalmente aerodinámica con un coeficiente de 0,25 cx o sus motores configurados para la eficiencia. Así que, cambiar estos por motores eléctricos nos da lo que Tesla quisiera que el Model X fuera: un eléctrico peculiar, para gente peculiar, que pueda ser un éxito hoy en día.
Reviviendo al Audi más infravalorado
Y es que el diseño del Audi A2 se presta para ser un eléctrico contemporáneo, que sólo necesitaría retoques en seguridad y conectividad para llegar al mercado. Pues bien, el “A2 e-tron” celebra los 25 años de este modelo (sin incluir el concepto Al2) y fue diseñado por estudiantes y aprendices de la casa de los Cuatro Aros.
Es curioso, ya que el concepto emergió sin demasiadas explicaciones en las redes sociales de Audi. En los videos se aprecia que el A2 eléctrico posee pequeños retoques, como el logo de los Cuatro Aros de Audi iluminado adelante y atrás, con nuevas luces LED adelante y atrás. Los retrovisores fueron reemplazados por cámaras y las manijas de las puertas también fueron removidas, mientras que los rines son más aerodinámicos que nunca.
Audi no revela qué mueve al A2 eléctrico, posiblemente sea un único motor eléctrico similar a alguno de los presentes en el Q4 e-tron. Así que es lógico creer que tenga una potencia entre los 150 a 201 caballos y una batería compacta de 50 a 60 kWh, con un rango de 400 km. Suficiente para moverse por la ciudad sin mucho problema.
Es un ejercicio interesante, que nos lleva a imaginar qué ocurriría si el A2 siguiera vivo. También puede darle ejemplo al proyecto ID.2 de Volkswagen para hacer un city car eléctrico que el mundo quiera. No es la primera vez que los estudiantes de Audi hacen algo así, hace un tiempo conocimos un NSU Prinz restaurado, también con poder eléctrico.