2024 fue el año en el que todas las marcas decidieron colectivamente aplazar la transición a motores eléctricos. No por capricho ni nada por el estilo, sino porque es simplemente imposible implementar ese cambio en tan poco tiempo. Aston Martin es la marca más reciente en no solo aplazar la llegada de sus primeros modelos 100% eléctricos, también anunciando que el regreso del nombre Lagonda no ocurrirá, al menos en el futuro cercano.
¿Por qué es tan importante ese último detalle? Porque Lagonda sería el nombre de una gama exclusiva de modelos eléctricos que acompañaría a Aston Martin. Algo así como Maybach para Mercedes-Benz, para que se haga una idea. Planes que, por ahora, quedaron archivados en las oficinas de la marca británica.
Bajando el voltaje a los Aston
Lawrence Stroll, en conversación con los medios, reveló la decisión de aplazar sus planes eléctricos y el regreso de Lagonda. Stroll asegura que el interés renovado por motores a combustión los llevó a explorar el camino de los híbridos enchufables, en contraste a lo que Stroll percibe como un “interés reducido por modelos eléctricos”.
No es un sentimiento exclusivo del segmento premium, porque la demanda por autos eléctricos de todo tipo no es tan alta como se anticipó. Si los clientes de un segmento más exclusivo prefieren el sonido de un motor real, el olor a su gasolina y otros elementos que Aston Martin no quiere perder, imagine segmentos de autos más asequibles.
Así pues, Aston Martin combinará lo mejor de los dos mundos, mezclando el clásico motor a combustión con asistencia eléctrica adicional, en forma de modelos enchufables. Por la forma en la que Stroll lo pone, los Aston Martin híbridos no se limitarán al Valhalla o Valkyrie, así que un DBX híbrido enchufable estaría en los planes inmediatos de la marca.
Los eléctricos de Aston Martin sí llegarán, solo que su desarrollo y lanzamiento se aplazó de 2025 a 2026.
Sueño eterno para Lagonda
En cuanto a Lagonda, Aston Martin lleva años buscando una forma de revivir la marca. Fue hace más de una década que Aston Martin pretendía usar el nombre Lagonda como una división superior a Aston Martin, con SUVs y sedanes más exclusivos.
El único fruto de esa idea fue el nombre Rapide, que dio vida a un sedán de Aston, para dar paso al Lagonda Taraf del cual se produjo una serie muy limitada. El anterior CEO de Aston Martin, Andy Palmer, quería que Lagonda fuera un rival de Tesla con un portafolio “juvenil y lleno de eléctricos”, pero ese plan murió cuando Stroll compró la marca.
Ante eso, el magnate canadiense piensa que “Lagonda no tiene razón de ser en la actualidad, ya que Aston Martin tiene suficiente prestigio y lujo para ocupar ese nicho”. En otras palabras, Lagonda sería un producto inferior a Aston Martin, y no ayuda su nombre desconocido para muchos.
Así pues, el primer eléctrico puro de Aston Martin llegaría hasta 2026 y muy posiblemente sea un SUV similar al DBX. Al menos ese es el plan actual, que puede variar si los híbridos siguen vendiendo bien en el segmento premium en el cual gravita Aston Martin.