Damas y caballeros, este es el fin de una era. Porque el futuro tiene muchos voltios y electrones, el Jaguar F-Type y su motor V8 se despiden una vez más. Aunque ya sabe lo que dicen, el que mucho se despide poco se va. Considerando que Jaguar Land Rover (o JLR) está reevaluando sus planes eléctricos en favor de híbridos, podría no ser el final de este modelo.
Lo que sabemos es que Jaguar, luego de varias ediciones limitadas, hizo oficial el final de producción del F-Type y su V8 supercargado. Si quiere unir el presente con el pasado, así terminan cinco décadas de biplazas deportivos de la marca británica que se remontan al E-Type. Seguramente Jaguar tiene un sucesor en mente (¿G-Type, tal vez?), pero por ahora sólo tenemos el silencio de un motor eléctrico en el horizonte.
1
Vuelvo al E-Type, en concreto al último ejemplar hecho por Jaguar en 1974, porque este F-Type V8 es un guiño directo. Desde el color verde giola hasta el techo convertible suave y la cabina con cuero Windsor en tonalidad beige. Por tal motivo, el último F-Type permanecerá en el poder de la marca, uniéndose a la colección de Jaguar Daimler Heritage.
En total, Jaguar logró construir 87.731 ejemplares del F-Type cupé y convertible, reemplazando al XK hace más de una década. Para mover a los F-Type más poderosos, Jaguar desarrolló una evolución de su motor V8 Supercargado con 5 litros de desplazamiento, capaz de producir 542 hp o 567 equinos en las versiones SVR.
Con Jaguar descontinuando esa familia de V8, la muerte del F-Type era inevitable. De hecho, un sucesor no está en los planes inmediatos, ya que Jaguar nos dice que se enfocará en el desarrollo de un gran turismo de cuatro puertas con poder eléctrico para llenar (por ahora) el vacío.
Así termina por ahora el linaje del deportivo insignia de Jaguar, sin un futuro prometedor. A menos que Jaguar tenga una corazonada y vuelva a hacer motores grandes y ruidosos, el futuro del F-Type, XK o como quiera llamarlo Jaguar no luce prometedor.