Le presento al Mazda CX-60, un SUV grande, lujoso, equipado y tan refinado que sólo se venderá en Europa y Japón. A medida que Mazda les suma números a sus modelos, están cada vez más cerca de parecer de una marca premium. Solo hay que ver la calidad interior o la apariencia exterior lujosa. Para lograrlo, lo fabricaron directamente en Japón con técnicas artesanales para darle una buena calidad a los acabados.
Bueno, hay que aceptar que su aspecto es un poco extraño desde algunos ángulos, pero eso no le quita su imponente estampa. Lo más importante de este modelo es que es la continuación del plan que anunció Mazda desde el año pasado, el de sumar más camionetas a su gama. Antes de aburrirse, déjeme darle un dato curioso: este es el vehículo más potente que ha fabricado Mazda. Ya no parece otro SUV, ¿verdad?
El poder bajo el capó
Mazda está muy orgullosa y llega estrenando plataforma en el CX-60 de motor longitudinal. Cabe destacar que, por ahora, llega con una sola opción bajo el capó. Se trata de una configuración híbrida enchufable, compuesta por un motor Skyactiv-G de 4 cilindros y 2,5 litros de cilindrada. Este se combina con un motor eléctrico de 134 HP para generar un total de 327 HP y 500 Nm de torque. Con esta potencia puede alcanzar los 100 km/h en tan solo 5,8 segundos. Según Mazda, una caja automática de 8 marchas sin convertidor de torque es la encargada de administrar la potencia. Así ya no parece otro SUV del montón.
Las baterías que usa el nuevo Mazda CX-60 son de gran capacidad, precisamente de 17,8 kWh, y con eso puede recorrer hasta 63 km sin usar gasolina. Mazda afirma que tiene tracción permanente a las 4 ruedas, pero no explican qué sistema usa. Lo que sí se sabe es que contará con un sistema que corrige la postura del vehículo al tomar las curvas, estabilizando la carrocería. También se sabe que en algún momento tendrá más motores disponibles; los famosos 6 en línea de 3 litros que pueden ser de gasolina o diésel.
Pura artesanía japonesa
Hasta el momento, el Mazda CX-60 se perfila como el nuevo buque insignia de la marca. Prueba de ello es que el interior está fabricado con técnicas de manufactura artesanal. Por ejemplo, el diseño interior se hizo siguiendo la idea Kaichou, qué es la combinación armónica de materiales y texturas para lograr la máxima comodidad. Dichos materiales pueden ser la madera de arce, el cuero napa, detalles cromados y el Musubu o materiales encuadernados. También se puede encontrar un poco de Hacho, el arte de la asimetría, en el tablero.
Mazda ha logrado hacer de la construcción de autos todo un arte, así se trate de una SUV grande, y la CX-60 es un claro ejemplo de ese logro. Aún no hay detalles como tamaños de la pantalla, funciones o demás artilugios que nos interesan, ya que es una especie de pre-estreno. Sin embargo, ya nos queda claro que las cosas con Mazda son diciendo y haciendo, tal como lo vimos con la CX-50 y como esperamos que sea con el próximo Mazda6.