Un nuevo integrante se une a la gama de Mercedes-Benz: se trata de la GLB, un crossover con aspiraciones todoterreno inspirada en la atemporal G-Wagen, como sugiere la primera de sus iniciales. Honestamente, hace rato perdimos la cuenta de cuántas clases diferentes fabrica Mercedes-Benz hoy en día, pero lo cierto es que los alemanes no dejan de sorprendernos gratamente con cada una de sus nuevas máquinas y la GLB no es la excepción.
Con un diseño bastante fiel al Concept GLB que mostraron hace algunos meses en el Salón de Shanghái, la Mercedes Benz GLB tiene una apariencia que refleja tanto su amplio espacio anterior como su capacidad fuera del pavimento. Una novedad importante es que es el primer vehículo en ofrecer la opción de siete asientos dentro de la gama de compactos de Mercedes Benz, un segmento que en 2018 vendió más de seiscientas mil unidades.
Bajo la carrocería, la GLB saldrá al mercado con cinco opciones diferentes de motorización, dos motores a gasolina y un motor diésel, todos ellos de cuatro cilindros y turbocargados, acoplados a caja doble clutch de siete u ocho cambios con la opción de tracción total permanente en los modelos 4MATIC. La versión más potente, la GLB 250 4MATIC, vendrá con 224HP y podrá acelerar de cero a cien en 6.9 segundos.
En cuanto a equipamiento, la GLB incluye todos los aditamentos que uno podría esperar de un Mercedes-Benz nuevo y hasta más: desde sistemas de asistencia al conductor hasta el sistema de entretenimiento MBUX con comandos de voz y realidad aumentada, sin mencionar el Off-Road Engineering Package opcional para mejorar sus capacidades todoterreno e incluso un sistema llamado Energizing que se sincronizará con smartwatches para darle al usuario una experiencia adecuada a sus niveles de sueño.
¿Así o con más juguetes?