Existe un dicho en el mundo automotriz: mueres joven y con un legado intacto o vives lo suficiente para convertirte en un crossover más. Sí, lo acabamos de inventar, pero cada día es más cierto. Que sus ojos no lo engañen, este es el nuevo Volkswagen Gol, ahora en forma de SUV compacto que adopta el nombre Tera. ¿Por qué la marca no quiso conservar el nombre? No lo sabemos.
Este es otro modelo más de entrada al mundo Volkswagen, que se ubica por debajo del también compacto T-Cross y a la par del Polo en el portafolio de la marca. Si los quiere contar, son cinco modelos distintos basados en plataformas y motores similares: Polo Track, Polo TSI, T-Cross, Nivus y ahora el Volkswagen Tera.

Fórmula conocida en empaque light
Desarrollado en Brasil y utilizando la plataforma del Polo, el Volkswagen Tera mide apenas 4 metros de largo. Eso es 20 cm menos que el T-Cross, modelo que creíamos tenía cubierto ese segmento B-SUV. Además no está solo, porque el Tera es compañero del Škoda Kylaq, otro SUV compacto de 4 metros o menos que se ensambla en India.
En esencia, Volkswagen le quitó el “Mont” al Teramont y nació esto, un Nivus light de 3,995 metros de largo, con una distancia entre ejes de 2,56 m. Motivando al Tera tenemos el viejo conocido 1,0 TSI de 3 cilindros y, si bien Volkswagen do Brasil no confirmó cifras, el Škoda Kylaq desarrolla 114 hp y 178 Nm a las ruedas delanteras.

Usaría una transmisión manual de 6 marchas o una automática de convertidor de torque convencional con levas, también de 6 reglajes adelante. Volkswagen tampoco lo revela, pero usaría una configuración simple de suspensión y frenos: independiente McPherson y discos adelante; eje semi rígido y tambores atrás. Es un SUV de entrada, después de todo.
Marcando las casillas de un SUV compacto
Donde se distancia el Tera del Kylaq es en diseño. Škoda opta por un crossover de proporciones más convencionales, mientras el Tera tiene una ligera caída en el pilar C hasta la parte trasera, con aire cupé.

Luce un frente musculoso con ópticas horizontales y una barra LED, similar al nuevo Tiguan y Taos. Techo en color negro, placas de deslizamiento y pasos de rueda plásticos son requisitos para un “mini” SUV, al igual que un despeje al suelo de unos 18 a 19 cm. Nos atrevemos a decir que posee un diseño más distintivo y mejor logrado que los T-Cross y Nivus.
En su cabina encontramos una pantalla de 10” con conectividad inalámbrica, seis bolsas de aire, panel de instrumentos de 8” y un sólido espacio para cinco ocupantes. Al menos, esas son las especificaciones del Kylaq, que luce idéntico por dentro. Volkswagen promete algunas asistencias al manejo (ADAS), iluminación ambiente y carga inductiva para celular. Su baúl estaría entre los 400 a 450 litros.
Es claro que el Tera apunta a los SUVs compactos que se toman Latinoamérica. Como el Fiat Pulse, Renault Kardian, Chevy Groove, Toyota Raize, entre otros. Por tal razón Volkswagen invirtió en su desarrollo junto a Škoda, para acaparar ese segmento lucrativo que va en alza en la región.
Espere al Tera en los próximos meses en Brasil y durante el segundo semestre de 2025 en el resto de América Latina.