Sí, sus ojos no lo engañan. Lo que aquí aparece, camuflado en un vano intento por enmascarar sus intenciones, es el Lamborghini Temerario GT3. Sucesor del exitoso Huracán GT3, cuyo servicio como bastión en las pistas para la casa italiana está a punto de llegar a su fin, luego de representar muy bien a Lamborghini en todo tipo de categorías GT3, competencias de resistencia, en fin.
Claramente más exitoso que el Lamborghini SC63, al cual le cuesta terminar las competencias, incluso si de la nada aparece con velocidad para largar en la pole position. Todo lo opuesto al Huracán GT3, que desde 2015 acumuló victorias en casi todas las categorías que disputó. Desde IMSA, DTM, FIA GT, WEC, en fin.
Hasta alcanzó el triunfo en las 24 Horas de Daytona (en su clase), pasando por dos evoluciones. 2025, por lo visto, sería el último año que oiremos rugir su V10, desarrollado entre Lamborghini y Dallara.
Un temerario buscará replicar al huracán
Entrará al ruedo el Lamborghini Temerario GT3 el cual, entre otras cosas, cambia ese V10 por un V8 biturbo. No que Lamborghini confirme esa información, pero es lógico ya que el modelo de calle usa ese motor y las reglas de GT3 estipulan el uso de una unidad de potencia similar a la de producción.
Su presencia y mirada lucen más intimidantes que el Huracán que reemplaza, con un alerón aún más grande y un splitter frontal rediseñado. Seguramente Dallara apoyará el desarrollo del nuevo GT3, cuyo debut en competencias podría ocurrir en 2026.
Consideramos que el V8 perderá su componente híbrido, regulado a potencias entre 600 y 700 caballos, según las normativas de la FIA. Será más ligero, tendrá muchos ductos de refrigeración, difusor, jaula antivuelco, volante con pantalla, en fin. Todos los sistemas de un auto de competencias.
Ahora, a sentarnos y aguardar más información sobre el Lamborghini Temerario GT3, mientras el Huracán termina con decoro su última temporada.
