He aquí una Toyota FJ43 Land Cruiser con una sorpresa: un motor V8. Pero no es un V8 de Toyota, como los excelentes 1UZ y 1UR que portan algunos Lexus y la serie anterior (L200) de la Land Cruiser. Lo que aquí ve es una mezcla de lo mejor entre Japón y Estados Unidos; por un lado la fiabilidad y durabilidad que caracterizan a la FJ y por el otro un V8 americano como tanto gustan entre los entusiastas.
El proyecto que aquí ve es obra de Legacy Overland y es una restauración completa de una Toyota Land Cruiser FJ43, pero con un motor V8 de Chevrolet. Trasplante necesario, ya que el viejo motor de 6 cilindros de la serie FJ que portaba este ejemplar estaba en condiciones deplorables y, ya que en EE.UU. venden V8 en la carnicería de la esquina, era la elección lógica.
Restaurada de pies a cabeza
Todo inició con apenas parte del chasis y la carrocería oxidados de una FJ40. Cirugía que necesitó la reconstrucción del chasis, eliminación de óxido y la instalación de nuevos paneles de carrocería, siempre preservando la línea original de la FJ. Ello incluye el techo blanco y su exterior en verde esmeralda.
Siguió la suspensión de muelles, que recibió un kit de levantamiento de 2,5 pulgadas firmado por OME (Old Man Emu) y ARB, rines en acero y calzado General Tire M/T. La defensa frontal fue restaurada y recibió un winche de rescate, junto a luces auxiliares. Los faros frontales se reemplazaron por luces LED, aunque la parrilla, logos, guardabarros, espejos y paragolpes traseros se mantuvieron como si fueran de fábrica.
América grita V8
El clásico motor V8 de 350 pulgadas cúbicas (5,7L) fue adaptado a la bahía de motor de la Toyota Land Cruiser FJ. Con culatas Edelbrock, sistema de inyección Holley, nuevo radiador con ventiladores eléctricos, booster para frenos de disco y dirección hidráulica, esta FJ se sentirá moderna. Ayudan sus 315 hp, enviados a las cuatro ruedas cortesía de un diferencial con bloqueo y transmisión manual de 5 marchas con bajo.
Como es un restomod, sólo quedaban los detalles. Tales como asientos de cuero en la cabina, portavasos, radio con conectividad moderna, aire acondicionado y un sistema de sonido. Todo contrastando con la palanca de cambios e indicadores originales.
Alguien realmente quería esta FJ, porque de ser un “cascarón” oxidado pasó a un fabuloso ejemplar modernizado. Uno que fácilmente puede superar los $100.000 dólares americanos, por si quiere contactar a ese preparador para restaurar algún producto de Toyota. También se especializan en otras generaciones de la Land Cruiser, las Land Rover clásicas y Ford Bronco, por mencionar algunos.
