Si usted es amante de los autos y vivió esa época en que YouTube era apenas una novedad, seguro habrá visto C’était un rendez-vous. Puede que no la recuerde por su nombre, pero apuesto que recordará imágenes de un loco atravesando París a toda máquina en la madrugada. Tan legendario es este cortometraje que Ferrari y su joven estrella de F1, Charles Leclerc, le harán un remake en Mónaco usando nada menos que un SF90 Stradale. La grabación tuvo lugar este fin de semana y aquí le traemos el detrás de cámaras…
Un remake por todo lo alto
Esta nueva versión se titulará Le Grand Rendez-vous y se grabó en las fechas en las que normalmente estaríamos celebrando el Gran Premio de Mónaco. A diferencia de la original, la producción realizada por Ferrari fue algo perfectamente legal y en un ambiente controlado. La emoción, sin embargo, estará garantizada pues el remake de Ferrari contará con la participación de Charles Leclerc, piloto oriundo de Mónaco, y la dirección de Claude Lelouch, el creador del cortometraje original. Leclerc no solo es más hábil que Lelouch, quien estaba tras el volante en su versión, sino que tendrá a su disposición más de mil caballos de potencia.
Animado por un V8 turbocargado de 4.000cc, el Ferrari SF90 Stradale cuenta además con el apoyo de tres motores eléctricos. Semejante potencia le permite alcanzar los 100 km/h en 2,5 segundos, perfecto para recorrer a toda velocidad las calles que normalmente compondrían el histórico circuito de F1. La casa de Maranello promete que el estreno de este remake será el 13 de junio y que será una fiel adaptación del cortometraje original. Prueba de ello son las fotos que muestran a Lelouch mismo dándole indicaciones a Leclerc para cumplir la premisa de la versión original.
Era una cita
La premisa de C’était un rendez-vous era extremadamente simple, pero emotiva. Oímos un corazón palpitando mientras salimos de un túnel oscuro, escuchamos el rugido de un potente V12 italiano y después vemos casi 8 minutos de conducción temeraria por las calles desiertas de París. Al final, el carro parquea frente a la basílica del Sacré-Cœur, el conductor se baja y sale afanoso a abrazar una mujer. No es más: no hay carros saltando de edificios en Dubai ni jalando cajas fuertes en Rio, C’était un rendez-vous traduce simplemente Era una cita. Grabado en 1976, este cortometraje fue hecho por el director Claude Lelouch sin efectos especiales…ni autorización de la alcaldía local.
El cortometraje era un secreto a voces del cual solo se conocían algunas versiones piratas. Lelouch, en entrevista con la revista Automobile, comentó todos los detalles sobre la preparación para esta producción. Todo empezó con 9 minutos sobrantes de película de 35mm y terminó con una carrera increíble por las calles de París en un Mercedes-Benz 450SEL 6.9. Lelouch después grabó el sonido de su Ferrari 275GTB y lo demás es historia. Sobra decir que no recomendamos que intente esto en casa, mejor esperar a mediados de junio para ver con qué nos sorprenderá Le Grand Rendez-vous…