De Tomaso vio lo que hizo Ferrari hizo para Gran Turismo y dijo “sostenga mi cerveza”. La diferencia es que este vehículo sí es real (o eso parece) y no está limitado por los confines de la imaginación y el mundo real. De Tomaso lo llama P900, y es lo que sucede cuando un acaudalado coleccionista de autos italiano quiere su propio auto de carreras para la calle pero no quiere pagarle un centavo a Ferrari, Pagani o Lamborghini.
Si lo que esperaba era un tributo al icónico Pantera, el De Tomaso P900 no es para usted. Este parece un prototipo alienígena o un auto ficticio para GTA V con un gigantesco alerón, una cabina que parece más la de un avión que la de un carro y su ingrediente secreto: un enorme V12 rugiendo tras el habitáculo. En pocas palabras, la vieja confiable a la hora de preparar un hypercar de producción limitada.
¿V12 o V10? El sabor que prefiera
Claro que esta no es la presentación oficial, sino un adelanto para adelantar que el P900 se adelantará a la competencia en el futuro. Al menos eso es lo que creo. Los datos y detalles técnicos son algo escasos, pero lo que pude revelar tras su cabina curvilínea y parte trasera que parece un par de turbinas de avión, es que tendrá un V12 con al menos 900 hp y una caja secuencial Xtrac de seis o siete marchas.
Hay un asterisco y es que aquel V12 no estará listo sino hasta 2024. Así que si le sobran 3 millones de dólares pero no tiempo, De Tomaso coloca un V10 construido por Judd en su lugar. Dejo que usted decida si es mejor un V10 con pedigrí de F1, o un V12 que puede cantar hasta los 12.300 RPM.
Por cierto, el nombre P900 hace referencia no solo a su potencia, sino al peso que, sorpresa, será de 900 kg. De Tomaso se atreve a decir que será tan rápido como un prototipo de Le Mans, lo que me lleva a pensar que quizá este auto termine corriendo en carreras de resistencia. Quién sabe, De Tomaso está algo limitado en términos de producción como para prometer cosas de otro mundo.
Nave espacial con elegancia italiana
Los responsables tras el diseño del P900 son los mismos que crearon el Apollo Intensa Emozione. Aquel es un auto en extremo radical radical, lleno de ángulos agresivos y un ridículo alerón, así que en contraste este De Tomaso es más sutil y curvilíneo. Parece más una evolución del hermoso P72 que tal vez esté en producción o no, poniendo en duda la posibilidad de que exista el P900.
Aun así, este Hot Wheels hecho realidad promete un alerón con DRS, mejor desempeño que un Aston Martin Valkyrie y una sensación de exclusividad sin precedentes. No nos quisieron revelar fotos del interior, quizá porque sea sorpresa o porque no está listo. Pero imagino que será muy similar al del P72, sino que con más piezas de fibra de carbón y un aire que evoque a la pista y no a un teatro siciliano.
Solo 18 unidades del P900 se construirán, o eso espera De Tomaso. Considerando que no lo veremos sino hasta dentro de uno o dos años en su forma final, me reservo el juicio en torno a este hypercar de otro mundo. No tiene nada que ver que hay una posibilidad casi nula de que esté cerca de uno, mucho menos conducirlo porque todos serán para billonarios que jamás lo sacarán de su garaje.
