Seré sincero con usted: toda mi emoción de hoy estuvo en torno al RS 6 Avant. Nada más mírela, es una camioneta con suspensión baja y potencia por montones. El RS 7 Performance que ve aquí es la versión Sportback (o gran coupé, depende de su terminología) de aquel Audi. En el papel tiene el mismo desempeño del Avant, a excepción del peso ya que casualmente el RS 7 es mucho más liviano.
Para ser un sedán siniestro de algún villano o una enésima secuela del Transportador, es el auto perfecto. Pero solo saber que su versión Avant existe y tiene esa estampa única de carro fúnebre con esteroides, relegan al Audi RS 7 Sportback Performance a ser solamente “un sedán con desempeño de supercar”. Y la verdad no está nada mal, pero pudo ser más.
Rugir V8 sin lo práctico del Avant
Usted no encontrará nada malo en su V8 twin turbo de 4 litros que con turbos más grandes eleva su poder a los 621 hp y 850 Nm de torque. Su sistema de tracción Quattro y caja secuencial de 8 marchas llevan al modelo de 0 a 100 km/h en 3.4 segundos, y a fondo superará los 300 km/h, o 280 si tiene el limitador de fábrica.
Tampoco encontrará fallas en su dieta con rines de 22” más ligeros, partes en fibra de carbón y un peso total de 2.065 kg. Apropiado para un auto moderno de casi 5 metros de largo. El interior es un sueño en comodidad, con asientos en alcántara, material microperforado dinámica, cinturones de seguridad azules, tres pantallas para controlar el panel de instrumentos, entretenimiento y climatizador. Además de ser un sedán, es un deportivo de lujo, y en la cabina se siente.
Todo esto es fantástico, bueno quizá no el precio de 120.000 dólares. Pero el RS 7 Sportback Performance no es como su hermano Avant. Y en el gran universo de Audis creados desde los años noventa, el único sedán que supera a la familia Avant es el A8, solo por ser una siniestra limusina hecha y derecha. Si a usted le encantan los sedanes, no se detenga y admire este con desempeño de deportivo extremo. Pero el RS 6 Avant está allí, esperando a que se maraville con el mismo poderío y un baúl más grande.
