El pionero de la electricidad para Honda, al menos en la era moderna, colgará los guantes y el casco. Quizá uno de los vehículos eléctricos más simpáticos del mercado, el Honda e, comienza su despedida del mundo, retirándose de Europa y terminando su producción desde Japón a inicios del próximo año. He aquí uno que apenas tendrá la suerte de ver 2024, pero sin posibilidad de un futuro más allá de este año.
Así lo confirmó la misma marca, declarando que la producción del e llega a su fin para dejar a cargo al Honda e:Ny1 en el frente eléctrico. Preferíamos el nombre e a secas no solo por ser fácil de pronunciar sino por ser más simpático, pero aquel crossover cuyo nombre no repetiremos por ser tan enredado es más moderno y competitivo en el creciente mundo de los eléctricos.
Estilo por encima de la funcionalidad
Es una lástima porque el Honda e, si bien un auto que no caerá en gracia de entrada a todo el mundo por ser eléctrico, cumplía algo sin dudas y era el ser atractivo. Odie o no los eléctricos, todos podemos estar de acuerdo en que el Honda e era simpático y muy bien logrado, valiéndose también de tintes del pasado inspirados en city cars de Honda como el City o Today al igual que el Civic original.
Honda acertó a la hora de darle un estilo neo-retro que por estos días es furor, pero llegó muy temprano a la fiesta dadas las limitaciones de sus baterías. El Honda e poseía una batería de 35.5 kWh, la cual sólo ofrece 220 km de autonomía. Es claro que el Honda e estaba destinado a ser un vehículo 100% urbano, y la competencia rápidamente lo alcanzó y superó en rango. Hoy en día esa es la estadística que más importa en un eléctrico para el consumidor promedio, y el Honda e no podía evitar esto. Tampoco ayuda su precio alto que rondaba los 40.000 euros.
A través de un mensaje en su página web japonesa Honda confirmó que el e terminará su producción en enero de 2024. Solo tres años estuvo en producción, pero al menos dejó una buena impresión en el departamento estético. Así que hasta pronto Honda e, no será el eléctrico más potente ni el más eficiente, pero sí tenía estilo para derrochar. Más coleccionable que otros eléctricos de esta era sí será, en parte porque Honda no vendió muchos y por su diseño tan peculiar.