Nada como navegar en sitios de ventas de autos y anuncios automotrices para encontrar todo tipo de joyas. Casualmente esto que verá a continuación está en la misma página web en la que encontré aquel Volkswagen Beetle con alma de Porsche. Con ustedes la definición literal de un lobo con piel de oveja: un clásico Mercedes-Benz W121 “Ponton” que en realidad esconde el corazón palpitante Cosworth del legendario 190E 2.3 16 válvulas.
Solo imagine esa escena. Un semáforo en alguna calle alemana y algún joven con mucho dinero en su BMW 325i se hace junto a lo que cree es un “Mercedes viejo”. Con sus gafas oscuras y cabello lleno de gel, intenta competir con el caballero del Mercedes, solo para darse cuenta muy tarde que ese “cacharro” no es lo que parece. Eso amigos es el maravilloso deporte conocido como “derrotar incautos en un sleeper de verdad”.
Orígenes misteriosos
Semejante creación está a la venta en el sitio alemán Schroeder-Classics y lo más enigmático son sus orígenes. El anuncio indica que el proyecto fue completado entre 1992 y 1999, sin especificar quién o por qué. Una profunda búsqueda por Google (que duró una hora) solo arroja un puñado de fotos en un foro de Mercedes-Benz y eso es todo. Para colmo es una transformación muy bien hecha.
Por lo visto el Mercedes-Benz “Ponton” es una plataforma popular para crear todo tipo de sleepers extremos; además de este ejemplar con motor Cosworth 2.3 de 190E encontré swaps con propulsión V8 AMG e incluso algún maniático que instaló el tren motor de un Mitsubishi Lancer Evolution en uno de estos clásicos germanos.
Alemán de dos épocas distintas
La apariencia exterior del “Ponton” fue preservada casi en su totalidad y solo los rines estilo Maxilite AMG lo delatan. No obstante, el vendedor incluye los rines de acero con embellecedores originales, para disimular la naturaleza de este sleeper. Solo un escape doble atrás y la anchura de sus llantas sugieren que no es un Ponton normal.
Bajo el cofre emerge ese fantástico motor 2.3 litros de 4 cilindros mejorado por Cosworth, capaz de producir 182 hp. No es mucho, pero considere que el Mercedes-Benz W121 es más ligero que el 190E W201 que usaba este motor, para que se imagine su aceleración. El chasis fue modificado para recibir llantas de mayor diámetro y la transmisión del 190E. A modo de referencia, el Ponton W120 o W121 de cuatro cilindros original tenía un sencillo motor con potencias entre los 50 a 70 caballos.
Asumo que los frenos, suspensión y otras minucias también son del 190E, o al menos fueron mejoradas respecto al Ponton original. El detalle final está en su cabina, en la que adaptaron el tablero e instrumentos de dicho 190E, como si fuera una especie de restomod. Solo imagine esta quimera en manos de Klaus Ludwig o Bernd Schneider (leyendas del DTM) y más de uno quedaría sorprendido en pista.
Igual de sorprendente es su precio que asciende hasta los 185.000 euros. Por lo visto no es la primera vez que sale a la venta en sus 20 a 30 años de existencia, pero al menos tiene solo 6.000 km recorridos desde su transformación. Invitación para añadir muchos kilómetros más sorprendiendo a otros conductores incautos que no esperan nada de un simple “Mercedes Ponton”.