El experimento híbrido en el máximo escenario del rally mundial llega a su fin. En su más reciente junta mundial, la FIA anunció que los motores híbridos ya no serán una exigencia para los equipos del WRC, enfocándose de lleno en el uso de combustible sintético a partir de 2025. Todo para simplificar los vehículos de los competidores y, si lee entre líneas, atraer otras marcas al campeonato.
Ojo, la idea de un campeonato de rally 100% eléctrico sigue en el mapa. Pero, al menos a término inmediato, el WRC adoptará el combustible sintético en favor de motores con asistencia eléctrica.
No más voltios en los rallies… por ahora
Así fue la resolución del concilio de la FIA, en el que se establecieron esos ajustes a las normativas del Rally Mundial (WRC) a partir de 2025. Además de la supresión del componente híbrido que todos los autos de Rally1 deben tener, la FIA permitirá un peso mínimo diferente en relación con esta novedad. A su vez, se liberarán restricciones aerodinámicas y en el motor para balancear la pérdida de potencia por el componente híbrido. Esos 100 a 134 caballos menos serán fácilmente compensados por los equipos, en especial con combustibles sintéticos más eficientes.
La idea es simplificar los autos que compiten en el WRC, además de hacerlos más ligeros. Las regulaciones de Rally1 seguirán rigiendo la máxima categoría; mientras que para las divisiones junior como Rally2 se permitirá aerodinámica más extrema, escapes con menor restricción y transmisiones secuenciales para “acercarse” a los autos de Rally1.
La única ironía será ver a Hyundai, cuya división N eliminó al i20 e i30 en Europa, competir con motores a combustión cuando su enfoque es la electricidad.
Las novedades a futuro
A futuro, la FIA quiere introducir un nuevo paquete de normativas que tendrían efecto en 2026. Este incluiría una potencia limitada a 330 caballos, una celda de seguridad más robusta y común entre todas las marcas, transmisiones secuenciales de Rally2 y un presupuesto anual limitado a €400.000 para todos los equipos. Todo en aras de facilitar y simplificar el desarrollo de los modelos.
Un detalle interesante es que la FIA permitirá a las marcas homologar cualquier auto del segmento B o C, sean SUV o hatchback, al igual que modelos conceptuales. Siempre y cuando estos cumplan con las exigencias de esa nueva era.
Así pues, Hyundai, Toyota y Ford podrían usar cualquier modelo que quieran bajo esas normas. Imagine un N Vision 74 o un IONIQ 5 con motor a combustión. O suponga que Subaru entra de nuevo a la categoría, podrían usar casi cualquier modelo que deseen.
La electricidad pura sigue en el mapa, pero como están las cosas parece una idea mucho más alejada. Quizá la reducción de la distancia de las etapas y eventos ayude a una tercera división del WRC, exclusiva para modelos 100% eléctricos. Ya lo hace MotoGP y podría funcionar.