Aquí está, luego de un adelanto por fin conocemos los detalles que esconde la SsangYong, eh quiero decir, KGM Actyon, un “cupé-SUV” estilizado que ya está en Corea del Sur y que, a juzgar por los planes de expansión de KG Mobility, pronto llegará a África, Australia, el resto de Asia, Europa y Latinoamérica.
La novedad es que ya tenemos los detalles de la KGM, SsangYong, Daewoo, como quiera llamarla; en cualquier caso la Actyon es la versión premium y deportiva del más aventurero Torres. Como lo sospechamos, ambas compartirán plataforma y detalles mecánicos, pero claramente la Actyon apunta a un mercado más selecto que busca una camioneta elegante. Eso sí, dejamos el tema de la belleza a lo subjetivo, porque es claro que su diseño es todo menos convencional. Tal y como la Actyon original.
Aspiraciones lujosas
Denominada proyecto J120, la Actyon emplea la plataforma del Torres, con una extensión de 4,74 metros de largo. A rasgos generales, el diseño y piezas del exterior son similares, como la estampa del frente, la forma de las puertas y pasos de rueda; al igual que elementos de la cabina.
Con eso dicho, la Actyon es más grande que el Torres, preservando la misma distancia entre ejes (2,68 metros). Su frente posee elementos de la parrilla iluminados flanqueados por luces en forma de S (o número 5), con dos entradas de aire inferiores y los faros principales ubicados al costado. Un detalle en aluminio recorre la línea superior de las ventanas y conduce a la sutil caída “cupé” del techo.
Allí nos da una sensación de Range Rover, desde las luces finas o la forma del spoiler y caída del techo. El detalle más extraño son los faros LED adicionales ubicados en la línea baja de la defensa, elemento que ciertamente es único y poco ortodoxo.
Lo típico de una cabina moderna
Del interior por fin tenemos detalles e imágenes, que revelan un aura contemporáneo ya que el SsangYong o KGM Actyon no tomó riesgos. Están los típicos elementos que esperamos, como materiales suaves, dos pantallas de 12,3”, iluminación ambiente, una consola central flotante y botones concentrados en el volante, ya que brillan por su ausencia en el tablero o interfaces.
KGM nos dice que la iluminación ambiente es de 32 colores y que se pueden elegir acabados en fibra de carbono o madera real. Ya sabe, para ese toque de elegancia adicional que quiere evocar este modelo. Aprovecho para decir que el logo alado de SsangYong era mejor que la inscripción casi clínica KGM en el volante.
Buscando el lujo sobre la destreza off-road
Como era de esperarse, el KGM Actyon usará el mismo motor del Torres; una unidad de 4 cilindros, 1,5 litros de desplazamiento y turbo. Esta envía 168 hp y 280 Nm de torque a las cuatro ruedas, aunque un modelo 4×2 es opcional. La transmisión es automática y de 6 velocidades, nada del otro mundo pero “suficiente” para sus aspiraciones.
A la tasa de cambio del won coreano, el KGM Actyon ronda los 33 a 39 millones; que traducen a unos 25.000 dólares americanos para que se haga una idea. Si le soy franco, aunque el diseño es peculiar, no posee la controversia del original. Pero, sobre todo, tampoco comparte las capacidades sorpresivamente buenas lejos del asfalto.
Y sí, el Torres suple esa necesidad en el portafolio de la marca. Pero el Actyon original era un 4×4 mucho más capaz. Además de tener variante pickup, algo que le falta a su nueva versión, por ahora.