Porque todo con la letra X suena más extremo, incluso si se refiere a una camioneta de lujo. Genesis nos deja ver desde el Salón de Nueva York al X Gran Equator, un todoterreno lujoso en forma conceptual que bien podría inspirar un modelo de producción a futuro. Como mínimo, señala el camino que tomarían los crossovers de la casa coreana en los próximos años.
Básicamente es lo que Hyundai, a través de su casa Genesis, imagina a la hora de rivalizar contra el Range Rover. Aunque con proporciones curiosas, dado su capó alargado y la ubicación de sus ruedas, aparentando una corta distancia entre ejes. Si nos lo pregunta, tiene cierto aire a Bentley Bentayga y Rolls-Royce Cullinan.
Todoterreno de ultralujo
Como ejercicio de diseño, el X Gran Equator posee los típicos detalles de Genesis. Es decir, dos líneas LED para las luces frontales y traseras, que se extienden a los costados. Su diseño es sobrio y sin exageraciones, más allá de los pasos de rueda.
Destacan las luces antiniebla frontales, junto a una discreta toma de aire inferior con tres ranuras, rieles de techo y su corte shooting brake que recuerda a un Volvo P1800ES o un Jensen FF Interceptor. Eso es si ignora las enormes llantas todoterreno que calzan al concepto.
Francamente luce interesante y elegante, como algo que Genesis debería usar en sus diseños a futuro. Lo que sí permanece como un misterio es su propulsión, porque Genesis no reveló qué clase de motor tiene. Quizá es eléctrico y envía la potencia a las cuatro ruedas o tal vez es híbrido, con torque vectorial y modos de manejo para distintos terrenos.
Sospechosamente detallado y listo para producción
Lo que sí se deja ver es su cabina, que refuerza ese aire a Rolls-Royce o Bentley. Varios indicadores individuales pueblan un tablero con un estilo clásico, con botones físicos y pantallas integradas en dichos indicadores redondos. Curiosamente el techo tiene cuatro sunroofs, uno para cada pasajero, con una consola central generosa y bastantes gavetas de almacenamiento.
Se aprecia un habitáculo ataviado en materiales lujosos y de dos tonalidades, azul y beige. Incluso algunos de los indicadores toman ese estilo “altímetro” y muestran inclinación, ángulos de ataque y división de la potencia. La compuerta trasera se abre de tal manera que forma una mesa de picnic con dos sillas más, con acabados en madera.
Por la presentación de Genesis, existe una fuerte posibilidad que el X Gran Equator mute en un modelo de producción o le dé vida a la siguiente generación del GV60 o GV80. Por ahora, sólo nos queda la especulación y un concepto interesante para soñar con un 4×4 lujoso hecho en Corea del Sur, con prestaciones y acabados dignos de luchar con marcas establecidas en Europa.
