Damas y caballeros: nos complace anunciar que hay Nissan GT-R para rato, y el concepto Hyper Force eléctrico es prueba irrefutable de ello. Adición sorpresa a la familia Hyper de conceptos que Nissan reveló en el Salón de Tokio, está confirmación casi que oficial del siguiente GT-R será 100% eléctrica y como su predecesor quiere ser un deportivo de alta tensión que derrote a exóticos que cuesten el doble con el poder de la ciencia y tecnología de su lado.
Entre todos los conceptos Hyper, el Nissan Hyper Force es el que más opciones tiene de ser producido, como mínimo inspirando al siguiente GT-R eléctrico. No queremos decir que se ve listo para producción porque su diseño es muy radical, pero así como en el año 2001 Nissan mostró un concepto que inspiró al R35, aquí está el punto de partida del R36.
Inspiración nipona de los ochenta
Prepárese porque es hora de hablar de historia. ¿Sabe lo que creo Nissan aquí? No solo un regreso casi anunciado del GT-R, también es una carta de amor y referencia directa a la loca categoría de turismos Silhouette que se tomó a Japón durante los años ochenta.
La explicación simple es que Japón vio al Grupo B (rally) y Grupo 5 (Le Mans) y decidió combinarlos a ambos, luego de inhalar copiosas cantidades de alucinógenos. Gracias a esta categoría fue que el movimiento Bosozoku tomó fuerza, con bodykits alargados, alerones absurdos, pasos de rueda ensanchados, muchos ángulos radicales y otras locuras.
Dos ejemplos claros de esa época son el Nissan Silvia S11 y Skyline R30 Super Silhouette, dos iconos de esa época que conocimos, como no puede ser de otra forma, gracias a Gran Turismo. Juego que es directo responsable de la fiebre en torno al Skyline GT-R.
Agresividad a flor de piel
Es claro que el diseño del Nissan Hyper Force eléctrico es un directo homenaje a ese Skyline, con su corte bajo, frente alargado, splitter radical y un estilo contrastado que recuerda al actual GT-R. De hecho este concepto que aquí ve encaja con la idea de un GT-R moderno preparado bajo las normativas Silhouette. También hay pequeños tintes al GT-R reinterpretado por Italdesign, aunque con tantos ángulos radicales es difícil identificarlos.
Nissan promete un desempeño extremo con este concepto: 1.341 caballos de potencia para romper la barrera de los 320 km/h, proeza que muy pocos eléctricos de producción pueden darse el gusto de añadir a su portafolio. Fiel a la tradición Skyline el Hyper Force tiene tracción en las cuatro ruedas con el sistema e-4ORCE y promete baterías de estado sólido que soporten semejante cantidad de poder.
Nada como el apartado aerodinámico, que parece como un auto secreto en un videojuego tipo cyber o steampunk. Admire ese gigantesco splitter con aletas (canards) a los costados, llevando a otro nivel la forma de cuña. Ese frontal tiene dos niveles para dirigir el aire hacia el difusor y alerón traseros, con dos niveles de ajuste. La carrocería y chasis está compuesta en fibra de carbono, y su diseño claramente está inspirado en el actual GT-R, luego de tomar demasiados esteroides.
Nissan de forma conveniente omite las menciones directas a ese deportivo, una ambigüedad que confirma las sospechas de todos. Es claro que esos faros redondos atrás y la insignia frontal HYPER FORCE en la misma fuente y colores de GT-R son indicaciones de la naturaleza verdadera de este deportivo.
GT-R en todo menos nombre
Si no está convencido (por algún motivo) mire esto: los modos de manejo se llaman GT, para conducción placentera, y R para desatar la locura. Los gráficos de la interfaz digital fueron concebidos por Polyphony, responsables de los gráficos del GT-R R35 y de la saga Gran Turismo. Nissan solo acepten que el próximo GT-R está aquí, es claro como el día que su diseño estará inspirado por este concepto y será eléctrico.
No podemos olvidar la cabina que es un viaje futurista digno de la película Tron. Dependiendo del modo la luz ambiente cambia de un tenue azul a un violento rojo, tonalidad que también invade la cabina si se usa como un cuarto gamer. En serio, aquí se puede jugar Gran Turismo, iRacing, Assetto Corsa, lo que elija, todo cortesía de la realidad aumentada y virtual que es capaz de mostrar su interior.
Con este GT-R que no es un GT-R pero sí es un GT-R Nissan celebra 90 años de historia, y dejan una declaración para irnos. Si bien no van a admitir que este es el siguiente GT-R, las reacciones que cause su diseño e innovaciones dictarán las acciones de Nissan respecto a sus deportivos del mañana.
En otras palabras, si sus fanáticos lo quieren van a construir un GT-R R36. Con diseño controversial o no, creo que es claro que todo el mundo quiere otro GT-R lo más pronto posible, señores de Nissan, no tienen que darle más vueltas a la idea.