No hay duda que uno de los Ferrari más bellos, icónicos y caros de la historia es el 250 GT, o GTO, Berlinetta, SWB o mil otras nomenclaturas. Todas pertenecen a una familia de grand tourers y autos de carrera que desfilaron durante los años cincuenta y sesenta, se produjeron en números muy pequeños y hoy en día cuestan más que un país completo. Por eso es que cuando sale una réplica del icónico Ferrari 250 GT capta la atención de todos. En parte porque ofrece una forma “más fácil” de acceder a tan legendarios vehículos.
Para aclarar, las imágenes que ve aquí son apenas renders de cómo se vería la réplica (o recreación) de un Ferrari 250 GT SWB Berlinetta. Este es una versión de carreras del 250 de calle, con un chasis más corto (SWB) para mejor agarre en las pistas, y del cual existen unas 176 unidades nada más. Esta réplica es obra de Forge Design, quienes lo denominan “Competizione Veintidue” y supuestamente tiene inspiración hasta en el jazz de la época.
Promesas descabelladas
Apreciándolo por fuera, casi parece un restomod por sus enormes llantas con cierto aire moderno y ausencia de defensas. Su diseño toma “inspiración” del álbum Kind of Blue de Miles Davis, así como el museo Solomon Guggenheim en Nueva York. El primero lo entiendo, por el tono azul profundo del render y por ser la música de la época. ¿Pero inspiración arquitectónica? Enzo Ferrari no necesitaba de eso para esculpir carrocerías tan bellas como la del 250 GT SWB Berlinetta.
Forge Design asegura que el auto en concreto se basa en el 250 que triunfó en Le Mans en 1961, con una carrocería más ligera recreada en materiales compuestos. Los arcos de rueda fueron ensanchados, y la ventana trasera está hecha de policarbonato. Las luces son modernas y el chasis está hecho de aluminio y fibra de carbono.
El modelo usaría un V12 con “inyección de hidrógeno indirecta” para ser un auto limpio, cuya potencia es desconocida. Los frenos serían de AP Racing y la suspensión totalmente independiente, pero a estas alturas todo esto parece promesas y nada más.
¿Y si llega a ser real?
Si supera la etapa conceptual, esta réplica del Ferrari 250 GT SWB sería bastante llamativa y casi pasaría por uno de los autos de verdad. Con eso dicho, tantas promesas descabelladas evitarán que exista, o harán que su precio sea tan absurdo como el de un 250 100% real. En especial la parte del V12 de hidrógeno, que suena un poco impráctico de desarrollar para un auto producido en volúmenes tan limitados. Pero es diciembre, se vale soñar en grande.