Royal Enfield en Colombia presentó una moto difícil de entender, la Scram 411 de fabricación nacional. No me malinterprete, la moto se ve bien, tiene características que nos hace desearla y es ciertamente bonita, solo que no sabemos cómo definirla. Permítame explicarle. La Royal Enfiel Scram 411 está construida sobre la Himalayan, pero tiene un enfoque citadino, de ahí nuestra confusión. Ellos dicen que es una Scrambler, pero lo usual es que se tome una moto citadina y le añadan capacidades todoterreno. En este caso, lo que hicieron fue tomar una moto de tipo Adventure con habilidades para todoterreno o exploración, y la adecuaron para la ciudad. ¿Tiene alguna lógica? Ante los ojos del mundo no mucho, pero aquí en Colombia quizá sea un acierto.
Una trotamundos para la ciudad
Parece que a los ingleses les sentó mal perder a su monarca, porque la Royal Enfiel Scram 411 es una locura, aunque en lo personal nos beneficia a los colombianos. Para empezar, el motor de la Scram 411 es el mismo que el de la Himalayan. Se trata de una mecánica monocilíndrica con un solo árbol de levas con 411 cc. El resultado es que genera 24 hp y 32 Nm de torque, así que se hizo para trabajar a bajo régimen y hacer mucha fuerza para escalar montañas. La caja de cambios tiene 5 relaciones cortas, algo que se nota por sus 127 kilómetros por hora de velocidad máxima.
Luego está el equipamiento. La Royal Enfiel Scram 411 prescinde de muchos de los lujos de la Himalayan para desenvolverse mejor en la ciudad. Por ejemplo, no cuenta con el parabrisas, las barras de protección del tanque o el guardafangos delantero. En total, la moto desecha suficientes piezas para pesar 185 kilos, 14 kg menos que la Himalayan. Además, la Scram 411 posee una posición de manejo más baja, con un asiento ubicado a 795 mm del suelo, 5 mm menos que su hermana. Parece poco, pero para una persona que apenas alcanza el piso, 5 mm es la diferencia entre mantener el control y caerse.
Dominando la estepa de cemento
Parte de la pérdida de altura se debe a que la suspensión de la Royal Enfiel Scram 411 es diferente. La horquilla delantera pasa a tener un recorrido de 190 mm, en contraste con la Himalayan cuyo recorrido es de 200 mm. La suspensión trasera sigue siendo de un solo amortiguador, con resorte de 180 mm de recorrido. Esto significa que la moto está ligeramente inclinada hacia el frente.
Adicionalmente, la rueda delantera pasa de ser de 21 pulgadas a ser de 19 en la versión de ciudad. La razón es que las ruedas grandes permiten superar obstáculos, pero son un poco incómodas de manejar en las calles. A simple vista, la Royal Enfield Scram 411 sigue llamando la atención por otros detalles. Por ejemplo, el manillar está más acostado, apuntando más hacia el conductor.
Pensada para explorar la impenetrable urbe
En cuanto al cuadro de instrumentos, conserva su indicador analógico con un pequeño apartado digital. También conserva el tripper, una pequeña pantalla opcional que va dando las indicaciones del navegador al conectarse con el teléfono. ¿Un tripper de estilo rally para la ciudad? Pues sí. Piénselo bien, esta moto es ideal para quienes llaman a la ciudad, “la selva de cemento” o quien se queja de las calles rotas como si fueran trochas insuperables, que no está tan equivocado. Básicamente conserva bastante de las capacidades todoterreno, pero con más practicidad en la ciudad. Después de meditarlo mucho, ¡ya sé que es! Es un crossover como la Jeep Recon, pero a gasolina.