En estas épocas de pandemia, cuarentenas y restricciones a la movilidad existe el deseo inaguantable de salir de viaje a devorar kilómetros. Qué mejor momento para que Yamaha presente a la Tracer 9 en Europa, la evolución de su moto deportiva para turismo de largas distancias. Esta máquina es la evolución de la Tracer 900, también conocida como MT 09 Tracer que se presentó en el 2014. Ya llevaba bastante tiempo entre nosotros, así que este nuevo modelo llega justo a tiempo para hacer el relevo.
Ideal para viajar sin descanso
Fiel a su estilo e historia, la Yamaha Tracer 9 basa su mecánica en la recién estrenada MT-09. Eso significa que el motor CP3 de 890 cc genera los mismos 117 HP y 93 Nm de torque a altas revoluciones. Esto garantiza el comportamiento deportivo en carretera, aunque su peso sube hasta los 213 kilos. Para compensar esto, las relaciones de la transmisión de 6 cambios se modificaron para lidiar con el peso de la moto más los 193 kilos de capacidad de carga.
La Yamaha Tracer 9 puede cargar todo este peso distribuido en 2 pasajeros y 3 maletas de carga instaladas en la cola. Esta gran capacidad de carga se debe al chasis Deltabox de aluminio fundido que le da más rigidez a la moto y mejora su estabilidad de manera notable. Además, la suspensión es completamente ajustable de acuerdo con el peso que se ponga sobre la Tracer 9. Las horquillas delanteras de 41 mm y el amortiguador trasero son ajustables en su rigidez para mantener la dinámica de manejo estable.
Una apariencia futurista
Para el tablero, la Yamaha Tracer 9 luce 2 pantallas TFT de 3,5 pulgadas puestas en paralelo. En ellas se pueden controlar aspectos básicos como las revoluciones, la velocidad y la marcha. Adicionalmente, muestran datos de los modos de manejo, el cuentakilómetros y el estado de las ayudas al conductor. Estas ayudas son el control de tracción, de deslizamiento y de levantamiento de rueda delantera. Todos son configurables en varios niveles para poder ajustarla al gusto de cada piloto.
Finalmente, la evolución de la Yamaha Tracer 9 se nota más aún en su apariencia. Al viejo modelo no se le notaba la edad, pero con un nuevo modelo llega una nueva imagen. En este caso, las luces rasgadas de la Tracer 900 se reemplazaron por luces diurnas en LED con un aspecto similar, pero más pequeño. Las luces principales están en la trompa con forma redondeada, pero ocultas bajo una capucha en el carenaje. Este aspecto es de amores y odios, pero inevitablemente recuerda al estilo de la última YZF R1.
Ya sea que le guste o no, la Tracer 9 está lista para devorar kilómetros cuando se abran las fronteras terrestres. Solo hacen falta ganas de viajar, mucho tiempo libre y unos 11 799 euros para comprarla sin incluir los accesorios. Eso son más de 51 millones de pesos colombianos sin contar con los costos de importación y comisiones cuando llegue al país, pero un buen paseo por carretera justifica el gasto.