¿Acaso estamos en los años setenta? Está un Renault 4 y 5 en venta, el Volkswagen Golf sigue entre los más vendidos y en el espectro opuesto está el Citroën 2CV; la única diferencia es que hoy por hoy todos estos tienen poder eléctrico. Bueno, casi todos, pero eso estaría por cambiar.
Porque varios medios británicos, entre ellos Top Gear y Autocar, confirman que Citroën ya trabaja en ese renacer eléctrico del 2CV. No es que la casa francesa lo haya confirmado, pero tampoco lo negó. Es más, dejaron claro que “mantienen la puerta abierta a la opción de un nuevo Deux Chevaux para competir con la nostalgia del Fiat Panda y los Renault Twingo y R5.
Deux Chevaux… sabor eléctrique
Por el lado de Autocar, el medio afirma que Citroën de forma interna ya se encuentra en la etapa inicial para el desarrollo de un 2CV eléctrico.
Aunque se encuentra en la fase inicial de desarrollo (según el reporte), el nuevo 2CV ocuparía un nicho entre el e-C3 y el Ami, en ese peculiar rango de los eléctricos que cuestan unos 20.000 euros. Sería en esencia una respuesta al R5 que no sólo fue carro europeo del año, también inició con pie derecho su ciclo de ventas.
Leyendo entre líneas
Ante el asunto, dos figuras importantes de Citroën “hablaron” sobre el 2CV eléctrico. Thierry Koskas (jefe de Citroën) respondió a Top Gear cuando lo increparon por este proyecto que “no diría que nunca harán otro 2CV”. Sentimiento al que hace eco el jefe de diseño de la marca, Pierre Leclercq. Él asegura que no van a darle la espalda a los diseños retro, aunque la filosofía y el por qué de estos es importante.
Ambos señalan que Citroën tienen varios íconos para revivir a causa de esta ola nostálgica. No obstante, si van a elegir uno, muy seguramente será el 2CV. Si lee entre líneas lo que dicen ambos hombres, significa que Citroën al menos considera seriamente el renacer de tan popular nombre.
Los planes posibles
¿Cómo pasaría? Sin duda, el segmento al que apuntaría Citroën con un 2CV eléctrico es el más asequible. No tanto como el Ami que es un cuadriciclo, pero sí similar al 2CV original.
Tendría que ser sencillo y a la vez deseable, de prestaciones citadinas, espacio al menos para cuatro ocupantes y con los estándares de seguridad y equipamiento justos. El original tenía un diminuto motor de 2 cilindros que, por mucho, rozaba los 40 hp. Una encarnación moderna equiparía un solo motor eléctrico por debajo de los 100 hp y baterías para recorrer al menos 300-400 km con una sola carga.
Por encima de todo, debe ser fiel a ese rango por debajo de los 20.000 euros y tener un estilo que sea una reinterpretación moderna del original. Porque la nostalgia vende y muchos, jóvenes o viejos, quisieran tener un 2CV moderno, sentimiento similar al Renault 4.
¿Ocurrirá? No lo sabemos con certeza, pero parece que todas las señales están allí y un 2CV eléctrico tarde o temprano emergerá.
