BMW agrega un integrante más a la ilustre familia M de alto desempeño. El BMW M4 convertible regresa, esta vez con un paquete Competition y un techo suave evocando a los autos cabriolet clásicos, pero con suficiente desempeño y emociones para que su cabello vuele bajo un día de brisa y sol… si es que el indomable clima latino coopera.
Con buen o mal clima, la versión convertible del M4 (antes M3) es bastante popular porque trae todas las bondades y potencia de la versión M, pero al aire libre. Sólo que en años recientes las versiones cabrio poseían un techo rígido. Sin embargo, con esta nueva versión que ya habíamos espiado anteriormente, BMW le garantiza ser el centro de atención a donde quiera que vaya… y no es sólo por la riñonera frontal del M4. Cuando se tienen 503 caballos de potencia y un techo que puede “desaparecer” en menos de 20 segundos, uno tiende a olvidar la apariencia del auto que conduce, y se concentra en la diversión que este ofrece.
Desempeño al aire libre
El M4 Convertible vendrá exclusivamente en la versión Competition. Este viene con un sistema de serie Active M, que le permite elegir entre varios modos de tracción y conducción. Además de estos 503 caballos, el motor S58 6 cilindros en línea twin turbo del M4 convertible entrega 650 Nm de torque; este se encuentra acoplado a una caja ZF secuencial de 8 marchas. La potencia se distribuye a las 4 ruedas gracias al sistema xDrive que es opcional en sus compadres M3 y M4 con techo “común y corriente”. Estas figuras son suficientes para lograr el 0 a 100 km/h en 3.6 segundos; y una velocidad limitada de 250 km/h, aunque por un “extra”, este limitador puede ser elevado cortesía de BMW, a 280 km/h.
Naturalmente, cortar el techo del M4 e instalar una cubierta suave requiere de sus modificaciones especiales. En el caso del M4 Convertible, el chasis recibió una dosis de vitaminas para aumentar la rigidez; un eje frontal distinto al coupé con nueva geometría de suspensión y frenos, y barras de torsión en el eje trasero. Según la marca bávara, el techo convertible le da a este M4 un centro de gravedad más bajo, y es tan rígido como la versión hardtop; a la vez conserva los mismos niveles de protección acústica.
BMW también ofrece una serie de elementos opcionales para el M4 Competition Convertible. Por ejemplo, está disponible un paquete Race Track M que reduce el peso del M4 en 25 kg y agrega frenos de cerámica; este lo puede complementar con la opción M Drive Professional que en pocas palabras es un paquete exclusivo para pista, que le permite ser todo un “Schumacher” mientras el M4 hace casi todo el trabajo.
El BMW M4 Competition Convertible entrará en producción en septiembre de este año, con un precio de entrada de $87.295 dólares. Con todo esto, el M4 se convierte en una opción interesante que combina desempeño que roza el territorio de los supercar, con el prestigio y atención de un convertible.