Porque disfrutar de un BMW Z debería hacerse, por ley, con tres pedales y total control de la transmisión. Un año después que Toyota lanzara al GR Supra con transmisión manual, BMW hace lo propio y le da un pedal operado de forma manual al Z4, para restaurar el balance en el mundo de los deportivos. Todavía es un prototipo en prueba (como revelan las imágenes), pero su debut está a la vuelta de la esquina.
Antes de que alguien nos corrija y sentencie que “el BMW Z4 ya tenía transmisión manual” una aclaración. Aquí sabemos que el BMW Z4 con motor 4 cilindros turboalimentado tiene hace bastante tres pedales (en ciertos mercados), pero allí no es la novedad. Aquí hablamos del Z4 más potente, la versión M40i, con el famoso motor seis en línea que excede los 300 caballos de potencia. Por eso nuestra emoción, ya que el M2 no será el último Bimmer manual, el Z4 lo acompañará con gusto a las puertas del Valhalla automotriz.
El Z4 que el mundo merece
Parece un universo alterno, pero el BMW Z4 con transmisión manual será más caro que su contraparte automática. ¿Por qué? ¿Acaso los manuales no son la opción más asequible? La razón, nos dice BMW, es porque quieren hacer del Z4 M40i un deportivo mucho más puro y visceral para los entusiastas, por lo que la única novedad no será esa transmisión desarrollada por Toyota.
BMW agregará al Z4 manual una dirección más precisa puesta a punto para un manejo más animoso y agresivo. La suspensión también será más firme, con barras estabilizadoras más capaces y los rines serán escalonados, con 19” adelante y 20” atrás. Todos ingredientes para hacer que la conducción del Z4 sea más involucrada y gratificante para el conductor.
Podrá ser idéntico al GR Supra y tener 335 (o 385) caballos de potencia a su disposición, pero el Z4 tiene algo que ese Toyota no tiene: una experiencia a cielo abierto. Ahí es donde BMW quiere evocar la experiencia del Z3 al igual que el Z4 original, brindándonos un biplaza más análogo que si bien no es tan agresivo como un M2 o un M4, sí tiene tres pedales para complacer a los más puristas fanáticos de BMW.
No es tampoco sorpresa que BMW quiera salvar a los manuales. El GR Supra con esta opción vendió de forma muy convincente y destrozó en materia de desempeño a su contraparte automática. BMW no tenía excusa para llevar al Z4 al límite posible entre el humano y la máquina, y nos agrada que los bávaros tomen ese camino.
