Esta es una perspectiva interesante, y antes de que crucifique las palabras del hombre de Renault, regálele una oportunidad. Luca de Meo, quien es el director ejecutivo, presidente, rey, conde, como quiera denominarlo de Renault nos presenta con un pensamiento particular: hoy no hay marca europea que esté invirtiendo en crear más motores a gasolina.
Según su postura todas las casas motrices que son natales de Europa o se mueven por ella, ante las regulaciones que se vienen, detuvieron todo lo que tenga que ver con combustión y se volcaron a otras cosas. Tiene a Toyota que se aferra al hidrógeno, por ejemplo, porque no todo es electricidad. En lo que compete a crear motores a gasolina nuevos, ninguna marca europea lo está haciendo, al menos para el mandamás de Renault.
La electricidad va tan adelantada ¿para qué parar?
Las declaraciones de Luca de Meo llegan después de que la Comisión Europea revaluara su prohibición de motores a combustión para permitir combustibles sintéticos. Sin querer desmeritar al hombre, esta es una de esas declaraciones para tirar algo de presión a los gobiernos; a la vez que Renault “saca pecho”. Es importante comprender que, en efecto, muchas marcas ya volcaron sus esfuerzos a la electricidad para cumplir estas regulaciones, y no es momento de echar atrás o dudar porque pondría en riesgo su inversión y desarrollo.
En concreto, de Meo piensa que la transición a motores alternativos es irreversible y que todas las marcas en Europa ya abandonaron el barco de la combustión interna. Eso incluye proveedores de partes, fabricantes de componentes y todas las industrias que soportan la producción de vehículos. Para él es necesario que exista una “neutralidad tecnológica” que tenga en paridad a todas las marcas respecto a desarrollo y emisiones. Y ello incluye dejar de invertir en un motor para concentrarse en otro.
Es más, para él los combustibles sintéticos son una solución poco práctica por lo pequeña y alternativa que es respecto al gigante de la propulsión eléctrica. Y allí tiene razón, la producción de esta gasolina limpia está en pañales, e invertir para ampliar la producción, mover cadenas de distribución y todo lo requerido no sería práctico a estas alturas.
Aún hay espacio para innovar
En esencia, el CEO de Renault piensa que todas las marcas abandonaron el desarrollo de motores a gasolina porque ya no es económicamente viable. Al menos en Europa, porque en otras regiones del planeta la cosa cambia. Tiene a General Motors desarrollando un nuevo V8, Stellantis reveló un motor a gasolina hace poco, y algunas marcas como BMW o Audi aún tienen en consideración esos propulsores.
Más que las marcas lo hayan abandonado por completo, se ven forzadas a cumplir con lo que Europa quiere. Pero el motor a gasolina todavía tiene algo que dar, y creemos que las marcas guardarán su desarrollo de forma temporal, con el fin de concentrarse en otras alternativas. Renault va muy adelantada en el aspecto de la electricidad y por eso es que su director ve las cosas de esa manera.
Sea que esté de acuerdo o no, la realidad es que Europa puso una meta complicada para las marcas. Y por fuerzas mayores tiene más sentido adaptarse a la electricidad que buscar alternativas. Pero las limitaciones traen innovación, por eso Porsche le apuesta a su e-Fuel. Lo peculiar del futuro es que nadie sabe qué será popular, incluso si le apuestan a una única solución como lo es la electricidad. El futuro del automóvil podría ser uno completamente distinto al que las marcas y entidades ambientales le apuestan.
