El plan de Peugeot para ingresar de nuevo a Estados Unidos queda cancelado, al menos por el momento. Así lo confirmó el CEO de Stellantis, Carlos Tavares, en un comunicado con la prensa del 8 de marzo de este año.
Los rumores del retorno de la marca francesa a suelo estadounidense se vienen cocinando desde hace varios años, cuando el Grupo PSA, ahora Stellantis, anunció planes para volver a Estados Unidos en un plazo de 10 años.
El Peugeot 508 era el elegido para liderar la marcha francesa y, de hecho, un 508 hizo una aparición sorpresa en un evento de cars and coffee hace dos años; no obstante, Francia ha decidido privar a los norteamericanos de su portafolio de vehículos. Al menos, por ahora.
Au revoir Francia, ciao Italia
Con la unión del Grupo PSA y FCA, quedaba casi que confirmado el regreso de Peugeot a Estados Unidos. Sin embargo, Stellantis le puso el “freno de mano” a las ilusiones francesas en Norteamérica. En vez de baguettes, los americanos tendrán una ración extra de spaguetti.
Alfa Romeo será quien reciba los recursos y esfuerzos para incrementar su presencia en Estados Unidos. Para lograr tal objetivo, Stellantis ha nombrado a Larry Dominique como líder de Alfa Romeo Norteamérica. Dominique era quien lideraba el esfuerzo de Peugeot para volver a Estados Unidos luego de su salida en 1990.
Al respecto, Carlos Tavares se refirió a la situación de Peugeot. “Por el momento, no creo que es una de las cosas a las que debemos dar prioridad en el futuro cercano. Considero que es mejor que concentremos el talento y capital que tenemos en Stellantis para aplicarlo a nuestras marcas y mejorar lo que tiene que ser mejorado, y acelerar lo que debemos acelerar porque ya tenemos una presencia importante en el mercado”
Enfoque norteamericano
Dicho en otras palabras, Stellantis desea concentrar sus recursos en fortalecer todas sus marcas dentro de los mercados donde se encuentran actualmente. Y esto es algo importante, ya que recientemente la firma reportó las pérdidas generadas por las marcas bajo la sombrilla de FCA, mientras que el Grupo PSA generó ganancias importantes en el año 2020.
En cuanto al mercado norteamericano, a pesar de las pérdidas, Stellantis tiene una fuerte presencia gracias a Jeep, Dodge, Ram y Chrysler. Esta última, a pesar de ser una de las más afectadas por las bajas ventas, continuará en Estados Unidos y debe ser “reinventada”, según manifiesta Tavares. Y ahora más que nunca Chrysler es una marca que necesita los recursos para volver a conquistar los corazones de los estadounidenses. Introducir una nueva marca podría afectar aún más la presencia de Stellantis en el país.
En cuanto a Alfa Romeo, este cambio de dirección significaría la entrada de dos nuevos crossovers dentro del portafolio de la marca en el mercado norteamericano. Es posible que Stellantis decida “prestar” a Alfa Romeo modelos ya existentes de Peugeot y comercializarlos en Estados Unidos. Tendría sentido desde lo comercial, ya que Peugeot tiene dentro de su portafolio al 2008 y 3008 que sí tienen presencia en México.
Por ahora, los estadounidenses tendrán que esperar al regreso de una marca francesa a su país. Pero bueno, por lo menos ya pueden importar Peugeot 205 GTi y 306, al menos para alardear y ser de los pocos dueños de un Peugeot en Estados Unidos.