2025 verá varios lanzamientos importantes, uno de ellos proviene de Hiroshima. Será el Mazda CX-5, que en 2025 estrenará una importante actualización para dejar claro que el nombre no desaparecerá, como ocurrió con la CX-7, CX-8 y en parte el CX-3. Además, parece muy claro que la hibridación está en el menú del nuevo CX-5, señalando que Mazda por fin tiene la manera de luchar en la era de la electrificación.
Patentes filtradas en Japón detallan algunos elementos del motor y sistema híbrido que usaría el Mazda CX-5 2025, por un lado. Y por el otro tenemos ilustraciones digitales que destapan el posible diseño del CX-5, con una apariencia cercana a lo que ya debutó con el concepto Arata y el Mazda 6e, ambos de desarrollo chino.
Ya lo dijo Toyota, ciertos modelos necesitan ayuda externa y el CX-5 no sería la excepción.
Rediseño, pero no es un cambio extremo
En materia estética, el artista conocido como Kelsonik en redes sociales se basa en prototipos camuflados de ese nuevo CX-5.
Estos dejan claro que, a pesar de lo antigua de su plataforma, el CX-5 actual recibirá una segunda actualización mayúscula. Una que tendrá un frente aún más detallado, con luces LED más angulares y una parrilla en forma de D sonriente más pequeña, similar al concepto Arata. Nuevas tomas de aire laterales e inferiores adelante adornarían la fascia y, a detallar, serían las ópticas LED en dos niveles, con un aire más moderno.
Nuevos rines serían la gran novedad en los costados, porque sus 4,5 m de largo y 2,7 m entre ejes no cambiarán. Atrás se alcanza a ver otro detalle en el prototipo camuflado, evidente en el render: unas luces alargadas como las ya vistas en los CX-60 y CX-90.
Cuestión híbrida
Patentes reveladas en Japón muestran la motorización híbrida que usaría el Mazda CX-5 2025. Sería una unidad cuatro cilindros transversal con un motor eléctrico ubicado en la transmisión, que muy seguramente dejará la hibridación ligera por una más convencional.
La familia de motores térmicos será la nueva Skyactiv-Z, mucho más eficiente, limpia y compacta. Estos motores aceptarán ese sistema híbrido propio de Mazda, con lecciones aprendidas de Toyota. Todo esto hace más curioso el hecho que Mazda decida estirar la vida del CX-5, en vez de traer una nueva generación con toda esta tecnología.
Algo es cierto, el CX-5 y su lavado de cara llegarán antes de terminar este año. Además de estrenar tecnología híbrida propia de Mazda y un interior con cuadro de instrumentos digital, más equipamiento, asistencias de manejo e interfaces de mayor resolución.