Botes, aviones, saltos, derrapes, emoción y el Subaru Impreza más extremo alguna vez construido: esos son los ingredientes principales del más reciente Gymkhana. Esta espectacular serie de videos inaugurada hace más de 10 años por Ken Block está ahora a cargo de Travis Pastrana y el resultado hay que verlo para creerlo. Filmado en Annapolis, Maryland, la ciudad natal de Pastrana, este Gymkhana está protagonizado por el múltiple medallista de los X Games a bordo de un Subaru Impreza WRX STi con 862 caballos de potencia. Las acrobacias, sin embargo, no son lo único impresionante pues Subaru aprovecho la ocasión para revelar más detalles sobre este bestial Impreza…
Un saltimbanqui a 240 km/h
El video arranca por todo lo alto, literalmente, con Pastrana derrapando en un área residencial para después atravesar un río saltando por sobre un bote. El Impreza salta de una rampa a otra con total aplomo y sigue derrapando una vez aterriza, pasa frente a un policía sonriente y sigue recorriendo la ciudad en una nube de estruendo y caucho quemado. Pastrana y su Impreza luego llegan a un muelle donde hacen una impecable demostración de drifting sincronizado junto a una unidad del recién presentado Subaru BRZ.
En el clásico estilo Gymkhana, Pastrana derrapa por entre múltiples obstáculos, pero todavía falta la escena más increíble. Sus ojos no lo engañan: eso es un carro, derrapando debajo de un montacargas que lleva otro carro, y después poniendo una llanta fuera del muelle. Un mínimo descache de Pastrana al mando del Subaru Impreza habrían convertido este video de Gymkhana en un documental sobre fauna submarina. El siguiente destino es un pequeño aeropuerto donde nuestros protagonistas se encuentran con un avión acrobático para seguir haciendo diabluras.
Ahí Pastrana recuerda tenía afán y acelera hasta pasar los 240 km/h en una en angosta carretera rural camino a casa, no sin antes hacer un espectacular salto a esa velocidad. Después de un aterrizaje perfecto, marca al celular de su esposa y al final se reúnen ambos en Pastranaland…¡para hacer más acrobacias después de los créditos! Como si fuera poco, la gente de Hoonigan publicó también otro video mostrando las entrañas del Impreza usado para todas estas acrobacias.
La bestia al desnudo
Ya habíamos hablado de este monstruoso Subaru Impreza, pero muchos de sus detalles solo salieron a la luz hasta hoy. Empecemos por su corazón: un motor EJ cuatro cilindros boxer con una carrera de 75 milimetros y un diámetro de 99,5 mm para una cilindrada total de 2.332 cc. Este motor es tan extremo que no usa empaques de culata para poder soportar de manera confiable hasta 50 psi de boost. Apoyado por un enorme turbo pegado a su sistema de escape en Inconel, este propulsor produce 862 HP y 900 Nm de torque. Transmitir semejante potencia es tarea de una caja secuencial Sadev de seis velocidades con piñones reforzados acoplada a un sistema de tracción total permanente.
Su carrocería está fabricada enteramente en fibra de carbono, resultando en un peso de apenas 1.190 kilogramos, y fue probada en un túnel de viento. El alerón activo, por ejemplo, recuerda al DRS de un Formula 1 y ayuda a que la nariz del el Subaru Impreza se mantenga abajo cuando Pastrana realiza los saltos característicos a un video de Gymkhana. En el interior encontramos un tablero digital Cosworth, asientos Recaro y un timón con ajustes en tiempo real y hasta referencias a Ricky Bobby. La suspensión es probablemente el componente más mágico de todo el carro, pero lamentablemente no se menciona mucho al respecto. ¿Qué nos tendrán preparado Pastrana y la gente de Hoonigan para el próximo año? Ni idea, pero lo que hicieron en 2020 va a estar difícil de superar.