Mire con detenimiento este vehículo. Más allá de las calcomanías vistosas y rines aerodinámicos, este es el Volkswagen Jetta GLI que todos nos merecemos y es una lástima que solo es un concepto para el SEMA.
Junto a la plétora de autos aventureros que llevó Volkswagen a SEMA, este Jetta GLI destaca no solo por su imagen llamativa. Además de tener más poder bajo el capó (o cofre), este GLI fue bendecido con el don de una transmisión manual. Algo que ciertos mercados tienen, pero que en Latinoamérica no es una opción y aunque la caja de doble embrague (DSG) no está mal, la variedad de una transmisión tradicional es más que apropiada para un sedán deportivo como el Jetta.
Se eleva la temperatura
Para no alargar el sueño de este servidor de tener una caja manual en el Jetta GLI, este concepto emplea una transmisión de seis marchas con un nuevo embrague para manejar el incremento de poder. Este llega cortesía de RacingLine, quienes agregan una nueva toma de aire, intercooler más eficiente, sistema de refrigeración de aceite y algunas partes en fibra de carbón.
¿El resultado? El Jetta GLI pasa de 228 hp a unos nada despreciables 350 caballos; con el torque ascendiendo de 350 a 504 Nm. Ahora sí el Jetta es un sleeper hecho y derecho con números por encima del Golf R más potente. Sé que pensará que el torque steer debe ser catastrófico y quizá lo sea, pero el diferencial electrónico debe asistir en esa tarea. No debe ser imposible de controlar, a diferencia de cierto Golf W12.
Tuning sin el factor “sleeper”
RacingLine también mejoró los frenos del Jetta GLI, con discos forjados en carbón-cerámica de seis pistones. La suspensión también está rebajada con nuevos coilovers, una pizca extra de rigidez al chasis y rines aerodinámicos Monoblock Aerodisc. En el interior hay nuevos asientos tipo cubo Recaro y el mismo patrón rojo del exterior.
Quizá lo único que le sobra a este Volkswagen Jetta GLI es su bodykit, que está bien para el SEMA pero arruina su tinte de sleeper. No se ve mal si ignora los gráficos rojos, pero este servidor prefiere el look discreto de un auto que puede destruir a otros sin saber qué los golpeó. Aunque si usted es fanático de los bodykits anchos, este Jetta es del sabor apropiado.
