Rubbing is racing, son. Hora de pronunciar las palabras más importantes en todo el automovilismo: “drivers, start your engines”. Perdonará el entusiasmo, pero la anticipada secuela de Días de Trueno es una realidad y volverá a juntar el mundo de NASCAR con Tom Cruise. Hombre que el próximo año recibirá un Óscar honorario y que insiste en hacer sus acrobacias él mismo, como toda la saga de Misión Imposible lo demuestra.
Rumores no han faltado, la película original salió en 1990 y desde entonces siempre se quiso construir una franquicia. Sólo que no ocurrió y nos dejó una película de culto en el mundo del automovilismo. No será Le Mans, Grand Prix, Rush o Ford vs Ferrari, pero es bastante recordada y apreciada por muchos. Además de tener todo tipo de frases memorables y de darnos actuaciones maravillosas de John C. Reilly, Robert Duvall y Nicole Kidman.
“Hit the pace car”
Los que saben recordarán que Días de Trueno es básicamente Top Gun, pero en NASCAR; incluso salió tres años después en el momento que la carrera de Tom Cruise despegaba.
Ya tuvimos una secuela a Top Gun, así que para repetir la historia es preciso hacer una segunda Días de Trueno. Jerry Bruckheimer, productor de tanto Top Gun, Top Gun Maverick y Días de Trueno, confirmó que la secuela de esta película en el mundo de NASCAR se hará, con Tom Cruise protagonizando y produciendo. Eso confirmó el productor en la premiere de F1, donde también fue partícipe.
En esencia, las discusiones para Días de Trueno 2 van bastante avanzadas. Bruckheimer y Cruise exploran formas de modernizar la historia, de aprovechar la tecnología y de adentrarse en el mundo moderno de NASCAR. Uno en el que algunas tradiciones de 1990 conviven con nuevas tendencias, fanáticos y formas de ver las carreras.
Bruckheimer admitió que trabajan en ello, así que básicamente es una admisión que algo pasará. Para “echar más leña al fuego”, el expiloto de NASCAR Jeff Gordon reveló que, durante el estreno de Misión Imposible 8, Tom Cruise manifestó que “Días de Trueno 2 sí será una realidad”. Así que tómelo como quiera, pero Cruise tiene el toque mágico y está, a sus 62 años, en el momento más importante de su carrera.

No es (Ford) Maverick, es Cole Trickle
Ahora, a imaginar cómo será Días de Trueno 2. Seguramente Cole Trickle (interpretado por Cruise) volverá a la silla del piloto o será un dueño de equipo, a lo Roger Penske. Tal vez necesite probar algo, ser el mentor de un novato o simplemente ganar una última carrera por la gloria, por mostrar que la vieja escuela es mejor que la nueva.
Todo con el mundo de NASCAR como escaparate, con el complicado sistema de puntos, el nuevo auto (GEN 7) que parece más un auto de GT3 que un stock car, con las personalidades coloridas, los circuitos y óvalos, los pilotos internacionales como Shane Van Gisbergen o Daniel Suárez, en fin. Quizá sea más ambiciosa y grande que F1, en ese silencioso duelo entre Brad Pitt y Tom Cruise para demostrar quién logra hacer películas taquilleras.
Sólo podemos decir, ojalá tenga otra carrera de autos alquilados entre Trickle y su rival, Rowdy Burns.
