En medio de la división que tiene hoy en día el Grupo VW y su postura a las movilidades del futuro, aún queda un rayo de esperanza para lo tradicional. Con eso nos referimos al motor a gasolina, cuyo desarrollo hoy pasará de Volkswagen a las manos de Škoda. ¿No que el enfoque ahora será 100% eléctrico?
Pues tal parece que no porque los propulsores de combustión interna aún tienen cabida en el Grupo VW, pero no será para siempre. Verá, en los próximos 10 años Europa aún permitirá su venta, siempre y cuando cumplan con medidas muy estrictas de emisiones. No solo eso, otras regiones del mundo que no cuentan con la infraestructura eléctrica todavía tendrán demanda por propulsión convencional. Así que el Grupo Volkswagen tomó la decisión de delegar a Škoda el que sería quizá el desarrollo final del motor a gasolina por parte de ese grupo automotriz.
La balada final del motor a combustión
Usted recordará que hace un tiempo hablamos de Volkswagen y su motor EA211, el cual sería el último a gasolina de la marca. Es esta unidad la que ahora pasa a manos de Škoda para que cumpla esos estrictos requisitos de emisiones, dándole también prioridad a la eficiencia. El asunto va muy en serio, porque la marca checa está contratando todo tipo de personal experto en el campo del motor a combustión para ese “empujón” final en vehículos pequeños y medianos así como mercados emergentes. No solo eso, también continuarán el desarrollo para hacerlo más afín a configuraciones híbridas.
Esta familia de motores de tres y cuatro cilindros tiene desplazamientos más bien pequeños, que van desde 1 a 1.5 litros, casi siempre con turboalimentación. La idea es que Škoda exprima más desempeño de aquel motor a gasolina, con el fin de seguir moviendo a todo tipo de modelos del Grupo Volkswagen, y por extensión la misma Škoda, al menos por otros 10 años. Importante considerando que el EA211 aparece en al menos 50 modelos distintos al día de hoy, incluyendo al Tiguan, T-Roc y Passat que serán los últimos vehículos a combustión de Volkswagen.
Para tal fin Volkswagen también le solicitó a las entidades ambientales europeas que cambien o aplacen la llegada de las regulaciones Euro VII. Ello con el objetivo de reducir costos y estirar la vida de los motores que desarrollará Škoda. Eventualmente estos tendrán que cumplir con las demandas de Europa, pero lo que quiere el Grupo VW es más tiempo para tener listos esos motores. Puede que los titulares insistan que la electricidad es el futuro, pero el motor térmico, ICE o de combustión interna tiene todavía mucho de qué hablar, y mucho futuro en el panorama automotor, al menos por otras dos décadas.