La llegada de la nueva Himalayan estuvo plagada de desafíos para la marca india. Desde hace meses rondan imágenes espía, rumores y altísimas expectativas por parte de sus más férreos aficionados. Ahora, después de recabar meses de opiniones y hacer pruebas en terreno hasta el hartazgo, Royal Enfield nos presentó a la última edición de la Himalayan 450. Esta moto es una evolución de su antecesora, respetando su esencia pero actualizándose por completo. Hasta ahora pudimos conocer todos sus detalles y ver lo que prepararon los indios para recorrer todo el mundo.
Una exploradora de corazón
De forma muy apropiada, Royal Enfield le puso a su Himalayan 450 un motor nuevo llamado Sherpa. Esta mecánica de 452 cc. tiene para ofrecer 39.4 HP y 40 Nm de torque, y anuncia una afinación especial para funcionar en condiciones difíciles. La marca afirma que el motor funcionará bien a alturas superiores a los 5.000 metros sobre el nivel del mar, todo gracias a que está diseñado para trabajar mejor a solo 1.300 RPM. Su caja de 6 marchas está pensada para lograr ese objetivo, de manera que el motor siempre está en un nivel bajo de revoluciones a cualquier velocidad.
Además del diseño, lo que más destaca de la Royal Enfield Himalayan 450 es el tablero digital circular. Esta pantalla encapsula todo lo que antes estaba desperdigado en varios indicadores, haciendo que el espacio se vea más limpio. En sus 4 pulgadas puede organizar lo básico como el velocímetro, tacómetro y todo un menú de operación para la moto con 4 modos de manejo. También tiene un mapa integrado a base de Google Maps, que se complementa con la conectividad con el teléfono.
Preparada para cruzar cordilleras
La Royal Enfield Himalayan 450 nació de forma diferente a su antecesora. Los indios crearon esta moto desde cero con la idea de ser una todoterreno capaz, por eso usa una combinación de llantas de 21″ al frente y 17″ atrás, configuración típica de moto enduro. Luego, la construcción del chasis se hizo para que fuera más resistente y versátil, con más rigidez y menos peso que antes. Gracias a su construcción particular, el motor tiene la entrada de aire muy arriba, debajo del tanque de 17 litros.
Mas detalles de su naturaleza están en la suspensión, que está firmada por Showa y se apoya en una horquilla telescópica. Para la parte de atrás se vale de un solo amortiguador con resorte. El asiento puede ajustarse a 2 alturas diferentes para el piloto y el pasajero tiene su propio cojín independiente. En cuanto a tecnología, viene equipada moderadamente con inyección y acelerador electrónicos y ABS desconectable. Royal Enfield no reinventó la moto de aventura, solo la mejoró tanto que ahora destaca en un mercado lleno de semejantes.
